Dicen actos corrupción motivaron Revolución Abril del 65

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García Germán consideró que los guardias de San Isidro no aceptaron la propuesta del retorno de Juan Bosch, “porque ellos solo querían un Gobierno provisional presidido por su gente”.
García Germán consideró que los guardias de San Isidro no aceptaron la propuesta del retorno de Juan Bosch, “porque ellos solo querían un Gobierno provisional presidido por su gente”.

POR TOMÁS VIDAL RODRÍGUEZ

SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- La corrupción, la falta de respeto y la intransigencia de los líderes políticos y militares provocó la Revolución de Abril de 1965, afirmó un ex militar “constitucionalista” ayudante de la Jefatura militar del Gobierno de Francisco Alberto Caamaño Deñó.

El coronel retirado del Ejército Manuel García Germán dijo que desde la caída del Gobierno de Juan Bosch, el 25 de septiembre de 1963, predominó el desorden en los sectores políticos y los cuerpos armados, lo que motivó que un sector de los militares se reuniera en el restaurante Cesares, hoy Napolitano, para analizar la crisis que existía en el país y acordaron retornar a Juan Bosch a la presidencia sin elecciones.

En el encuentro estaban el mayor Rafael Fernández Domínguez y el coronel Hernando Ramírez, entre otros, dijo García Germán.
Pero, todo se frustró después de celebrar varias reuniones con los militares de San Isidro, quienes hicieron resistencia al retorno de Juan Bosch a la presidencia, añadió.

El constitucionalista, al analizar los acontecimientos de la Revolución de Abril, después de 49 años de ese acontecimiento patriótico, dijo que muchos de ellos han decidido conversar con la población, en especial con la juventud, para que conozca esa gesta y para explicar por qué un sector de los militares se levantó en armas para defender la Constitución y los derechos ciudadanos de la población.

Las actividades de los “constitucionalistas” inician en esta feria del libro, en el área del Museo del Hombre Dominicano, en la Plaza de la Cultura, donde serán expuestas una galería con centenares de fotografías de la Revolución, se pronunciarán conferencias y habrá otras actividades educativas.

Durante los próximos meses tienen contemplado habilitar de manera honorífica los puestos de comando, “porque la Revolución de Abril debe predominar en la conciencia de la población como uno de los acontecimientos históricos, donde los hombres y las mujeres defendieron la dignidad del pueblo dominicano”. Las actividades terminan el próximo año con la celebración del 50 aniversario.

El coronel e ingeniero de profesión García Germán aclaró que cuando se organizaban para retornar a Juan Bosch a la Presidencia prometieron que no habría traición, pero nunca pensaron que se produciría una enfrentamiento con otros hermanos en armas.

Asegura que el desorden era de tal magnitud que mientras un sector de los militares busca una solución a la crisis, 50 o 100 oficiales traían al país aviones cargados de electrodomésticos y otras mercancías por el aeropuerto de San Isidro para venderlos en el mercado local y acumular fortunas. “En esos días no se podía confiar en nadie, se perdió el respeto en los cuerpos armados y nadie respetaba a nadie”, precisó.

García Germán consideró que los guardias de San Isidro no aceptaron la propuesta del retorno de Juan Bosch, “porque ellos solo querían un Gobierno provisional presidido por su gente”.

Recuerda que en medio del desorden y el impasse entre las partes, el capitán Mario Peña Taveras, con apena 12 o 16 alistados se subleva en la Jefatura del Ejército, en el Kilómetro 25 de la autopista Duarte el 24 de abril de 1965 y hace preso el Jefe del Estado mayor, Marco Aníbal Rivera Cuesta “y no pasa nada”.

Al hablar sobre la Revolución de Abril el coronel retirado García rememoró dice lleno de orgullo: “Yo recibí esa noticia en la calle El Conde, de inmediato dejé mi carro en ese lugar y salí a pie para el Kilómetro 25, porque creía que caminando llegaba más rápido, pero me dieron una bola y cuando me presenté en la dotación militar me llamaron y me entregaron una ametralladora, solo pensé ‘Ahora sí’ y como no había autoridad, ningún oficial superior hizo nada para impedirlo a pesar de que en esa dotación militar habían decenas de oficiales superiores”.

“Todavía nadie pensaba en enfrentamiento armados, sin embargo cuando los militares de San Isidro bombardean el Palacio Nacional todo se complicó y comenzaron los enfrentamientos y en los primeros dos días ellos quedaron derrotados. Ellos estaban perdidos y sin apoyo de la población por eso llamaron las fuerzas interventoras”, expresó.