Hipólito Mejía considera gobiernos del PLD han decepcionado la nación

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Mejía se expresó así al encabezar en este municipio, un acto en respaldo a su candidatura, de dirigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en el Country Club del municipio de Villa Altagracia, donde juramentaba a cientos de dirigentes, seguidores nuevos, en su proyecto H16.
Mejía se expresó así al encabezar en este municipio, un acto en respaldo a su candidatura, de dirigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en el Country Club del municipio de Villa Altagracia, donde juramentaba a cientos de dirigentes, seguidores nuevos, en su proyecto H16.

VILLA ALTAGRACIA, RD.-  El expresidente Hipólito Mejía calificó como un hecho lamentable que gran cantidad de jóvenes del país estén inmersos en el vicio como es el consumo excesivo de alcohol, los juegos de azar y de otras índoles, por falta del apoyo del Estado a sus expectativas de progreso.

Dijo que los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) han decepcionado y hecho perder a esperanzad en el país, a gran parte de la sociedad y la básicamente a la juventud que no observa buenos ejemplos de conductas sanas desde los gobiernos peledeístas.

Mejía se expresó así al encabezar en este municipio, un acto en respaldo a su candidatura, de dirigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en el Country Club del municipio de Villa Altagracia, donde  juramentaba a cientos de dirigentes, seguidores nuevos, en su proyecto H16.

El aspirante a la presidencia de la República  señaló que hay salidas económicas y sociales para estas comunidades que se encuentran en el olvido, pero que se necesita que al gobierno vaya un mandatario que crea realmente en el desarrollo sostenido y planificado del campo.

Mejía dijo que la solución a la problemática de los hombres, mujeres, jóvenes y niños deben enfrentarse con rostro humano.

Afirmó que se le debe buscar una salida humana a la situación en que viven millones de dominicanos,  ayudándoles a salir de la indigencia y el olvido, con el apoyo del Estado  para progresar, sin incentivar la vagancia y los vicios.