POR ROBERT VERAS
En el marco de la conmemoración del 211 aniversario del patricio Juan Pablo Duarte, la Fundación Dominicana por la Vida, Inc. -FundoVida-, se convirtió en el epicentro de un encuentro solemne donde los protagonistas fueron los niños, niñas y envejecientes, quienes rindieron tributo a la vida, compromiso y principios del fundador de la Sociedad Secreta La Trinitaria y de la nacionalidad dominicana.
La actividad, llena de emotividad y reflexión, permitió que algunos de los pequeños líderes de FundoVida tomaran el micrófono para compartir con todos los presentes un boletín especial. En este, se destacaron las virtudes y vicisitudes de Duarte y sus compañeros en el arduo camino hacia la independencia nacional. Fue una ocasión para recordar y aprender de la historia que forjó las bases de la República Dominicana.
Juan Cruz Triffolio, sociólogo y comunicador, quien ostenta la presidencia de FundoVida, aprovechó la oportunidad para resaltar la imperante necesidad de seguir difundiendo el compromiso patrio y el sacrificio de un Duarte real, de carne y hueso. En su intervención, Triffolio hizo hincapié en la importancia de alejarse de las interpretaciones pasionales y románticas, buscando un acercamiento más pragmático y genuino a la figura de Duarte.
«Es fundamental que los dominicanos del presente y del futuro comprendan y apliquen en su vivir cotidiano los principios reales de nuestro fundador. Debemos despojar a Duarte de mitos y leyendas para abrazar la autenticidad de su legado, un legado que trasciende la gesta independentista y se erige como un faro de valores para nuestra sociedad», expresó el presidente de FundoVida.
En un momento en que la historia a menudo se ve distorsionada por la nostalgia y la idealización, la llamada de Triffolio resuena como un recordatorio oportuno. Celebrar a Duarte no solo implica rendir homenaje a un prócer lejano, sino comprometerse a incorporar sus principios en la vida diaria. FundoVida, a través de este encuentro significativo, destaca la importancia de cultivar un entendimiento profundo de la historia nacional y abrazarla como una herramienta para el crecimiento colectivo.
Así, mientras se conmemora el legado de Juan Pablo Duarte, la Fundación Dominicana por la Vida, Inc. cumple un rol crucial al guiarnos hacia una apreciación más auténtica y pragmática de nuestro pasado, recordándonos que la verdadera reverencia por nuestros héroes nacionales se manifiesta en la aplicación de sus enseñanzas en el presente y el futuro de la República Dominicana.
