En 2023, la justicia estatal emitió 553 mil 391 medidas de protección después de las denuncias de violencia doméstica, de acuerdo con Consejo Nacional de Justicia.
La semana pasada, el Consejo Nacional de Política Penal y Penitenciaria recomendó que los agresores involucrados en delitos de este tipo sean monitoreados electrónicamente.
El objetivo es garantizar que las medidas de protección de emergencia sean efectivas.
R7 preguntó a la cartera si tiene intención de adquirir tobilleras electrónicas para cumplir con la recomendación de la secretaría, además de cuestionar la fecha, la cantidad de equipos que se comprarían y el precio medio de cada uno.
Sin embargo, no hubo retorno hasta la última actualización de la nota periodística.
En noviembre, el Ministerio de Mujeres dispuso de 1,5 millones de reales (300 mil dólares) para la compra de tobilleras electrónicas para uso en agresores como mecanismo de protección a las féminas.
La iniciativa formó parte de los objetivos del Programa Mujer Vivir sin Violencia y del Pacto Nacional de Prevención a los Feminicidios.
El sitio también inquirió si el proceso fue cerrado, si los equipos fueron comprados y por cuánto y a qué unidades federativas los artículos serán distribuidos.
Tales interrogantes tampoco fueron respondidas y el espacio sigue abierto.
Expertos consultados por R7 afirman que las sugerencias pueden ayudar en la reducción de los números de violencia doméstica en el gigante sudamericano.
Al menos ocho mujeres fueron víctimas de violencia doméstica cada 24 horas, en 2023. Los datos se refieren a ocho de los nueve estados monitoreados por la Red de Observatorios de Seguridad (Bahía, Ceará, Maranhão, Pará, Pernambuco, Piauí, Río de Janeiro y Sao Paulo).
Para André Santos, presidente de la Asociación de los Delegados de Policía del estado de Sao Paulo, el monitoreo de los agresores con tobillera electrónica puede ser efectivo, siempre que sea acompañado de otras medidas.
«No sirve de nada tener solo la tobillera, es decir, los mecanismos para identificar que los agresores se acercan a las víctimas, sin que tengamos una pronta respuesta en el momento en que esos agresores se acerquen. Por lo tanto, la medida es importante, pero por sí sola no tiene efectividad», explicó.
