SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- Hace más de un año que no se encienden las luces del Faro a Colón, debido a que el mismo fue abandonado por completo, convirtiéndose en un objeto, y su estado es deplorable, por lo que necesita ser restaurado.
Así lo afirmó Mario Bonetti, gobernador del Faro a Colón, quien explicó que debido al abandono que ha sufrido el lugar, con el tiempo las lámparas se ha ido desgastando de manera tal que no resisten estar mucho tiempo encendidas.
Narra que a su llegada al Faro a Colón el lugar tenía matorrales en todo su entorno, los cuales servían de letrina, copulatorio y para que los delincuentes de la zona hicieran sus fechorías. Agrega que tampoco había energía eléctrica y que hasta la fecha el lugar solo recibe tres horas al día.
Dijo además que encontró dos salas de exhibiciones en el segundo y tercer piso que tenían más 10 años cerradas por falta de bombillas.
«En la segunda sala cerrada porque se quemaron las bombillas con el tiempo, entonces las salas no se podían prender porque el faro es un mauselo, es una tumba, entonces no hay ventanas, hay ventanitas para el interior.
Como había oscuridad no se podía poner a una persona a que cuidara la exposición y a los visitantes, entonces se cerró», expresó Bonetti al ser entrevistado en el programa El Despertador.
Señaló que en la sala cerrada en la segunda planta encontró una exposición sobre la moda en la época de la colonia de María de Toledo de cómo se vestían las damas en esa época; una que hizo César Albert llamada «África en América»; una historia de la arquitectura en dominicana desde la colonia hasta los edificios de Naco y Piantini, esos grades rascacielos pasando por la arquitectura de la República, y un esqueleto de un haitiano que se unió a las tropas dominicanas libertadoras el 27 de febrero contra el ejército de su país.
«Arriba una historia de la navegación del comercio marítimo, también cerrado. Entonces, ¿cual fue la excusa?, bueno que ningún gobernador jamás preguntó por eso, no hay electricidad, cerrado. Y dije no, vamos a abrirlo ahora mismo», refirió.
Bonetti expresó que ya no tiene la capacidad de gobernar el lugar.
«Yo soy un gobernador que no gobierna, pero quisiera gobernar. Yo no puedo, por ejemplo, cancelar ni contratar a nadie; no puedo usar el dinero que ingresa al Faro, que aún así en esas condiciones deplorables el Faro produce mensualmente entre 400 y 500 mil pesos que hay que depositar en la cuenta general de la nación República», añadió.
Enfatizó que al Faro se le asigna una parte de los recursos, pero que para usarla tienen que pedir permiso, «si yo quiero comprar un rollo de papel sanitario para las necesidades que implica esa compra yo tengo que pedir permiso».
