Por Emiliano Pérez Espinosa
Nueva York.- Según el Nuevo Testamento, cuando Jesús ayunaba, se le apareció su adversario (Satanás) y le retó diciéndole: “Si es verdad que eres el hijo de Dios, ¿por qué no conviertes estas piedras en pan para calmar tu hambre?”, y Jesús le respondió: “Escrito está, no solo del pan vivirá el hombre, sino de toda la palabra que salga de la boca de Dios”. Mateo 4:4.
Si repasamos la historia económica universal después de Cristo, nos daríamos cuenta que una gran parte de la humanidad vivió bajo el señalado principio descrito por Mateo, según el cual, lo más importante era la salvación eterna, hasta que en el siglo XVII, el inglés John Locke (1632-1704), el pensador del movimiento político, económico, y social llamado el Enlighment (La ilustración), se encargó de educar a las nuevas generaciones, no tan solo a vivir de la palabra de Dios, pero sino también, ponerle especial atención al papel del pan (producción material y/o desarrollo) en su paso por la tierra.
Preocupados por el desarrollo de la Región Enriquillo, el sábado 3 de junio de 2016, un nutrido grupo de Barahoneros, y de otras provincias de la Región, entre los cuales estaban: Alsy Pimentel, Frank Jiménez, y Carlos Feliz, entre otros, organizaron un interesante segmento radial que conectó las ciudades de Nueva York y Barahona, con el objetivo de analizar enfoques, y planteamientos de cómo podríamos contribuir con el desarrollo económico de nuestra Región.
Tal y como planteé durante el programa, según mi modesta opinión existen referencias de desarrollo que sería bueno estudiar y posiblemente implementar: como los planes quinquenales que tanto Rusia y la China usaron para su desarrollo, las recomendaciones de las tres conferencias mundiales de financiación para el desarrollo (2002, 2008, y 2015) y Los Objetivos Post 2015 de la ONU.
¿Por qué usar estas referencias? Es importante usar estas referencias debido a que la República Dominicana tiene una ley aprobada y promulgada sobre el desarrollo denominada: “Estrategia Nacional para el Desarrollo (END), que es nuestra carta de ruta en materia de desarrollo a nivel nacional. Por lo demás, he citado las otras experiencias, porque se trata de prácticas exitosas.
Nuestra propuesta es que los actores más importantes de la Región Enriquillo (senadores, diputados, síndicos, y empresarios de la Región) deberían crear una especie de Estrategia Regional de Desarrollo de cinco puntos (5) puntos para ser revisada cada 10 años y que esté alineada con la Estrategia Nacional de Desarrollo (END), y los Objetivos Post 2015 de la ONU.
Además, “aplatanar” 5 de las seis (6) preguntas de las conferencias mundiales sobre la financiación del Desarrollo: 1-¿Cómo movilizar recursos públicos para ser invertirlos en el desarrollo de la Región Enriquillo? 2-¿Cómo captar la inversión extranjera, y otros recursos privados para la Región Enriquillo? 3-¿Cómo usar los negocios internacionales como el motor del desarrollo de la Región Enriquillo? 4-¿Cómo aumentar la financiación internacional y la cooperación técnica con la Región Enriquillo? y 5-¿Cómo enfrentar el problema monetario para apoyar el desarrollo en la Región Enriquillo?
