La maestra escondió a los niños en un armario cuando el pistolero irrumpió en el aula.’
CONNECTICUT.- La cara del heroísmo en la tragedia ocurrida en el pequeño pueblo de Sandy Hook, Connecticut, le pertenece a la maestra de primer grado Victoria Soto quien murió intentando proteger a sus estudiantes, reportan varios medios.
Una de las víctimas fatales de la masacre que terminó con la vida de 20 niños y siete adultos, Soto ha sido destacada por su esfuerzo para salvaguardar a los pequeños que estaban en su cargo. Un gesto heróico que le costó la vida.
Según un relato de su primo, Jim Wiltsie, un policía, la maestra estaba escondiendo a los niños en un armario cuando el pistolero irrupió en el aula.
«Al hacer eso, ella se puso entre los niños y el atacante», dijo su primo a ABC News. “Y en ese momento fue trágicamente baleada y asesinada”.
La joven maestra de 27 años llevaba cinco años en la escuela elemental de Sandy Hook y su familia dice que murió haciendo lo que amaba.
“Su sueño de vida era ser maestra y sus instinctos se activaron cuando vió que sus estudiantes estaban amenzados”, añadió Wiltsie. “Ella perdió la vida haciendo lo que le apasionaba. Ella amaba a sus estudiantes”.
Al momento de morir, Soto estudiaba una maestría en educación especial en Southern Connecticut State University, y tenía un bachillerato en educación elemental e historia, indica la página web de The Guardian.
En su página de maestra, escribió: “¡Espero tener un gran año en el primer grado con mis maravillosos estudiantes del salón 10!”
El autor de este terrible incidente ha sido identificado como Adam Lanza, de 20 años, hijo de la maestra Nancy Lanza, que también fue asesinada.
