ESTADOS UNIDOS.- Para el sociólogo y escritor alemán, Heinz Dieterich, «fue una decisión bastante acertada» la de Hugo Chávez de nombrar a su vicepresidente y canciller Nicolás Maduro como su sucesor político, no solo porque el mandatario «conoce mejor que nadie la correlación de fuerza dentro de su partido y dentro del Estado», sino porque dentro de esos cuadros disponibles «el que más se acercaba al perfil que el Presidente quería para que se prolongara ese proyecto de su vida, para que no hubiera desviaciones aventureras hacia la derecha, hacia la izquierda».
«No había otra alternativa mejor. No digo que sea el candidato idóneo, pero dentro de lo que existe él es una persona querida por el pueblo lo que garantizaría que va a ganar las elecciones contra (Henrique) Capriles que es el primer paso mas importante. En segundo lugar ha sido fiel a los planteamientos básicos del proyecto bolivariano. Tengo que felicitar al Presidente en ese acto de su testamento político de dejar un sucesor que evite grandes convulsiones dentro de Venezuela», argumentó el analista de izquierda, en entrevista concedida el pasado martes a CNN.
No tiene dudas que en un escenario electoral Capriles-Maduro, el Vicepresidente se impondría, ya que unido a que la oposición «no ha logrado formular un proyecto político convincente alternativo, sino que vuelve a esas recetas gastadas del neoliberalismo», el electorado verá a Maduro «como el hijo legitimo del Presidente y al Presidente como un mártir del proceso». «Eso le va dar un estimulo extraordinario y si los chavistas hacen una campaña sensata (… ) con absoluta seguridad van a ganar. Maduro tendrá como 55%». Considera que el chavismo sobrevivirá sin Chávez, porque «es un modelo político, económico y social que ha calado en la gente»
Dieterich, quien da por descontado un regreso de Chávez al poder así sobreviva «porque su organismo ya no tendría la energía vital» para ocupar el cargo, no ve una crisis institucional en Venezuela, sino «un proceso normal de lucha por la hegemonía, por el control del partido (PSUV)». Ve normal que en una partido tan grande como el Partido Socialista haya posiciones diferentes entre sus líderes. A su juicio cuando Diosdado Cabello, presidente del Parlamento, proclama su lealtad a Chávez y afirma que cumplirá sus instrucciones, «acepta su derrota política».
