Por RAFAEL SANTOS
SALCEDO, RD.- Para Francisco Guzmán (Tico), de 22 años, de edad, el hecho de que le hayan amputado su pierna izquierda, no es motivo para distraerse y continuar adelantes, al tiempo que demandó justicia para los policías, que según él y sin justificación alguna, les provocaron graves heridas tanto a él como a su amigo Bernardo Almánzar, el pasado viernes 4 de febrero.
Sin embargo Tico emplazó a las autoridades de la provincia Hermanas Mirabal, y al Presidente de la república, al licenciado Danilo Medina, para que hechos como este no se vuelvan a repetir, ya que lo que le ocurrió a él y a su amigo, es algo que jamás se le podrá olvidar a la colectividad salcedenses.
De acuerdo a lo narrado, ese viernes 4 de enero, él había conminado a dos amigos para que fueran hacia el municipio Tenares, a compartir un par de trago, en donde aprovecharían para saludar a un joven conocido como Marinito, propietario de un centro de diversión, y con el que desde niños, ambos guardan una sincera amistad.
Luego, a eso de las 9 y 35 minutos de la noche, deciden trasladarse a Salcedo, distante, pero al pasar frente al destacamento policial, allí son esperado por una patrulla, los cuales pistolas y escopetas en manos los conminan para que salgan de una yipeta marca Rava4, modelo 2000, color rojo, placa número G003359, y a la que de inmediato uno de los policías le explotó la goma delantera derecha, mientras que otro conocido por el mote de Capotillo le da un primer disparo a su amigo Bernardo en el vientre.
Al ver esto, Tico sale del vehículo, y al preguntar el por qué de la acción cometida por Capotillo, de inmediato es tirado también al pavimento, al tiempo que el mismo policía le responde dándole un primer disparo en su pierna derecha.
Fue cuando según este, el también sub oficial, conocido como Gil, le apunta a su pierna izquierda y “me la explota”, según su propio testimonio, al tiempo que esposado y casi sin desmayado, logra escuchar cuando los uniformados conversan que estos son responsables de un atraco que minutos antes habían cometido en Tenares, así como de una golpiza dada a un oficial de la PN en la misma ciudad. Su otro compañero, Álvaro Luis Santana Felipe, lo hacen preso.
De inmediato ambos heridos son llevados al hospital Pascasio Toribio Piantini de Salcedo en donde reciben los primeros auxilio, pero debido a la gravedad del asunto, a Bernardo lo trasladan al Hospital Regional José María Cabral y Báez, mientras que al joven Francisco Guzmán, lo llevan al Profesor Juan Bosch, en La Vega, desde donde es transferido a la clínica Padre Fantino, en donde a las 48 horas de haber estado allí le amputan su pierna izquierda.
Guzmán clamo justicia al Presidente Medina, y responsabilizó a los sub oficiales Méndez, Gil y al alistado Capotillo, los cuales fueron cancelados por orden del Jefe de las Policía, Mayor General, José Armando Polanco Gómez
“Yo me siento bien gracias a Dios, con ánimo de seguir luchando, voy a durar un par de meses en mi pueblo, hasta que me recupere, me pondré una prótesis y seguiré en lo mío, en mi barbaría en el Bronx, en la ciudad de New York”, dijo de manera serena el joven lacerado.
Francisco Alberto Guzmán, había venido al país, el pasado día 30 de diciembre, para participar en el novenario de su abuelo Domingo Guzmán, en la comunidad de Jayabo, y tenía planificado hacer su regreso a la gran manzana apenan cumpliera con el compromiso familiar.
