WASHINGTON.- La tormenta “Nemo”, que golpeó con particularmente fuerza a los estados de Connecticut, Massachusetts, Maine, Rhode Island y Nueva Hampshire, ha causado seis muertes, dejado localidades con hasta tres pies de nieve y sin energía eléctrica a cientos de miles de personas.
Más de 600,000 hogares y oficinas estaban sin energía eléctrica, principalmente en Massachusetts y Rhode Island.
Tres personas murieron en Connecticut, una de ellas fue encontrada sin vida en la entrada de su casa, en Danbury.
En Boston, Massachusetts, un niño de 11 o 12 años, según la Policía, murió asfixiado como consecuencia del monóxido de carbono generado en un automóvil en que se refugió del frío con su padre, después de haber estado paleando, según el Servicio de Bomberos.
El automóvil fue encendido cuando el silenciador de escape estaba todavía bajo nieve.
El padre del niño estaba siendo tratado de emergencia en un hospital de Boston.
En la localidad de Poughkeepsie (Nueva York), mientras, una joven perdió el control de automóvil y arrolló a un anciano que caminaba por el lugar.
La sexta víctima, según CNN, murió en otro accidente de tránsito en Ontario, Canadá.
En Connecticut varias localidades – como Milford (38 pulgadas) -, recibieron cerca de tres pies de nieve.
“Es crítico que la gente siga fuera de las carreteras. Se trata de una tormenta que ha establecido récord de nieve y va a tomar tiempo sacar la nieve”, dijo el gobernador de Connecticut, Dan Malloy.
Según el Servicio Nacional de Meteorología, hubo zonas de Connecticut, Massachusetts, Maine, Rhode Island, Nueva Hampshire y Nueva York en que cayeron más de dos pies de nieve.
En muchas zonas del noreste, además, las ráfagas de viento alcanzaron fuerza de huracán.
En el aeropuerto de Logan (Boston, Massachusetts), la tempestad generó ráfagas de 76 millas por hora. En Boston habían caído esta tarde dos pies de nieve.
Las zonas rurales de Nueva York fueron las más afectadas. Pero, en Long Island – en la ciudad – hubo localidades con dos pies de nieve.
En Manhattan, sin embargo, la cosa estaba bajo control, con poco menos de un pie de nieve, según el alcalde Michael Bloomberg.
Los principales aeropuertos de Nueva York – John F. Kennedy y La Guardia – reanudaban operaciones, pero los vuelos de Boston y Hartford seguían suspendidos.
“Dos o tres pies de nieve representan una situación muy diferente a lo que hemos tenido que enfrentar en otras ocasiones”, afirmó el gobernador de Massachusetts, Deval Patrick.
Desde la tarde de ayer en la tarde, cinco estados decretaron medidas de emergencia. Mientras, los gobiernos de Massachusetts y Rhode Island prohibieron la circulación de automóviles. En Boston se detuvo el servicio del tren urbano de la ciudad.
Desde “La Gran Tempestad de 1978” en Massachusetts, no se imponía una orden para evitar la circulación de vehículos. Los violadores se exponían a una multa de $500. “El ritmo de la caída de la nieve y la reducción de la visibilidad hacía casi imposible que se transitara con seguridad”, sostuvo el gobernador Patrick.
Los automóviles podrán a volver a circular en Massachusetts a partir de las 4:00 p.m.