CARACAS.- El vicepresidente Nicolás Maduro está cada vez más presente en los medios de comunicación oficiales, llenando el vacío dejado por el presidente Hugo Chávez, algo que los analistas interpretan como el inicio de una transición, especialmente tras el último informe pesimista sobre el estado de salud del mandatario, divulgado.
El gobierno está «abriendo más el camino hacia el cambio político», dijo la historiadora Margarita López Maya, después de que el último comunicado oficial sobre la salud del mandatario indicara que «no ha sido favorable» la evolución de la insuficiencia respiratoria que presenta tras su operación de cáncer en Cuba.
El informe persigue o bien «elevar la emoción y conexión emocional con el líder o (bien) prepararlos (a los venezolanos) poco a poco a una mala noticia», apuntó a el analista Luis Vicente León de la firma Datanálisis.
El informe, leído por el ministro de Información, Ernesto Villegas, es el primero que conocen los venezolanos sobre el estado de salud del mandatario desde su sorpresivo regreso el lunes a Caracas y su ingreso en el Hospital Militar, que puso fin a más de dos meses de convalecencia en La Habana.
Para López Maya el camino de la transición en Venezuela se inició el pasado 8 de diciembre cuando Chávez reveló que se iría a Cuba para someterse a su cuarta operación de cáncer y designó a Maduro como su sucesor, en caso de que quedara inhabilitado para gobernar.
El vicepresidente sería el candidato oficialista en las elecciones que deberían celebrarse en 30 días.
La analista observa que el gobierno ha reforzado la imagen de Maduro, de 50 años, en los medios de comunicación después del 10 de enero, cuando el presidente no se pudo juramentar para su cuarto período presidencial ante el Parlamento.
El ejecutivo busca «mantener la figura de Chávez en el mayor tiempo posible en los medios» para reforzar la imagen pública de su delfín, asegura López Maya.
«El gobierno necesita dar una sensación de mando, cohesión y unidad. Las estrategias están llamadas a ganar el apoyo de la bases chavistas, porque Maduro no tiene un trabajo allí (.) Por eso su presencia en los medios y el mensaje tan radicalizado que mantiene contra algunos medios y la oposición», apuntó.
El vicepresidente ha debido suplir a Chávez en cumbres internacionales, encabezado desfiles y paradas militares e inaugurado obras públicas en incontables cadenas obligatorias de radio y televisión, desde la ausencia mediática del presidente tras su viaje a Cuba.
Incluso, el sistema de medios oficiales ha lanzado en los últimos días emotivos mensajes de televisión con un joven Maduro en actos por la revolución bolivariana y lemas como «Con Chávez todo, sin Maduro y el pueblo nada».
El gobierno insiste en que Chávez nunca se ha separado de sus funciones y divulgó este viernes una carta de ocho páginas escritas por el mandatario, leída por el canciller Elías Jaua, llamando al «trabajo conjunto» en la III Cumbre América del Sur-África, que se realiza en Malabo, Guinea Ecuatorial.
Chávez «está en un proceso de enfermedad compleja, pero no abandona sus competencias», afirmó Jaua en la cita.
En medio del debate sobre la salud del mandatario, algunos reconocidos juristas solicitaron al Tribunal Supremo efectuar con «urgencia» la postergada juramentación de Chávez, reelecto en octubre, en un acto público, ante una «junta médica» y con la presencia de los medios de comunicación.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, dijo a la BBC que la ausencia de Chávez debe ser tratada desde un «punto de vista político» al tiempo que advirtió que los partidarios del gobernante «no pueden separar de un día para otro» a su líder» tras 14 años en el poder.
«Chávez está de nuevo en Venezuela y supongo es el momento de las decisiones», sentenció.