ESPAÑA.- Aunque Shakira vive ensimismada con su primogénito Milan y atareada en su papel de entrenadora de la edición estadounidense de ‘La Voz’, la artista ha querido aprovechar las vacaciones de Semana Santa para acordarse de las dos mascotas que adoptó el año pasado con su pareja, el futbolista Gerard Piqué.
Con motivo del gran huevo de Pascua que le han regalado recientemente, en el que aparecen pintados dos adorables conejos, Shakira ha recordado a sus seguidores que, antes de cuidar a su hijo, estuvo al cargo de dos de estas inocentes criaturas, las cuales se vio obligada a ceder a otras personas al no poder dedicarles todo el tiempo que necesitaban.
«Miren lo que me han regalado por la Pascua. Este año, sin embargo, no tengo conejos, ¿los recuerdan? Felices Pascuas. Shakira», escribió la cantautora recientemente en su perfil de Twitter, poco antes de dar explicaciones sobre el paradero de los conejos ante la creciente inquietud de sus fans por el bienestar de los animales. «Pero no se preocupen, están sanos y salvos y en mejores manos que las mías. Les adjunto una foto como evidencia», añadió posteriormente la extrovertida intérprete.
Además de revelar que se ha pasado buena parte del parón primaveral disfrutando de la serie documental ‘The Bible’, producción que ha causado sensación entre el público estadounidense por su vínculo con el tiempo pascual, Shakira se dio hace escasos días un baño de multitudes en París durante la presentación oficial de su nuevo perfume, que tuvo lugar en el centro de la capital francesa y a escasos metros del emblemático Arco del Triunfo de la ciudad. La diva colombiana, sin la compañía de Piqué, no pudo disimular su asombro ante el poder de convocatoria que ejerce entre sus admiradores franceses, y a ellos les dedicó una amplia y permanente sonrisa que también se explica por la felicidad que le proporciona su estable vida familiar.
A pesar de destacarse como una de las estrellas más cotizadas de la industria musical y generar histeria entre sus seguidores, Shakira no es más que una madre normal y corriente a ojos de Gerard Piqué, quien precisamente aseguraba en una entrevista reciente que el devenir diario de su familia era como el de cualquier otra pareja de la sociedad actual. De hecho, el defensa del Barcelona insistía en que la fama y el reconocimiento internacional de ambos no juega un papel relevante en la intimidad de su hogar, y menos aún en las salidas que la familia protagoniza con frecuencia por las calles de Barcelona.
«No somos tan raros como la gente puede pensar. Intentamos hacer todo tipo de cosas normales como el resto de los mortales, porque nunca hemos querido que la fama nos convierta en idiotas. Obviamente, no salimos a cenar o a ver una película un sábado a las ocho de la tarde, hay ciertas cosas que debes evitar, pero por lo menos en Barcelona la gente es muy educada y respetuosa», contaba el futbolista en una extensa entrevista con el diario El País.
