SOSÚA, RD.- Un funcionario de la Alcaldía Municipal local fue muerto a tiros a manos de delincuentes en horas de la tarde de ayer, mientras que su hijo también resultó herido de bala cuando fueron emboscados por un grupo de sujetos.
La víctima es Adalberto Pichardo Martínez (Otto) de 54 años de edad, quien recibió heridas múltiples de bala en el tórax y en el brazo izquierdo que le costaron la vida al instante, mientras que su hijo José Adalberto Pichardo (Baberto) de 24 años, resultó herido de gravedad cuando fueron atacados a tiros en su residencia por el nombrado Juan Delmo Rivera de 48 años el cual fue capturado por la Policía Nacional de una forma «espectacular».
Los testigos oculares de esta tragedia indicaron que el homicida Delmo Rivera la emprendió a tiros contra el padre e hijo tras sostener una discusión con ambos ya que la victima presuntamente había denunciado que un grupo de delincuentes venían sembrando el terror en el sector Los Charamicos del municipio de Sosúa.
Mientras que la versión policial indica que el hijo del occiso José Alberto Pichardo (Baberto), el pasado día 7 del mes en curso había sostenido una acalorada discusión con unos tales Johan Quintana, «Bebo», Sandro, Frank y Jesús por el supuesto control de un punto de venta y distribución de drogas lo que desencadenó un tiroteo dejando una pistola guardada en la casa de Juan Delmo Rivera.
Pero ayer al caer la tarde el occiso y su hijo herido, supuestamente se presentaron a la casa de victimario a reclamar el arma de fuego antes mencionada, pero el nombrado Delmo Rivera en compañía de su hijo Noel Rivera Marizan se negaron a entregar el artefacto, desatándose una riña entre las dos familias que dejó el hecho de sangre.
Tan pronto cometió el asesinato, el homicida Juan Delmo Rivera en compañía de su hijo intentaron escapar por lo que se internaron dentro de una cueva entre los acantilados del mar por lo que se inició la persecución policial es su contra, logrando ubicarlos cuando nadaban en las aguas del Océano Atlántico con pretensiones de escape, lo cual fue impedido por el inspector policial de Sosúa; teniente coronel Samuel Medina Acosta, quien se vio obligado a utilizar una embarcación para apresar en alta mar al victimario.
Se informó que en la escena del crimen fueron se recolectaron dos cápsulas de pistolas automáticas calibres nueve milímetro y se procedió a tomarle las pruebas de adsorción atómica al cadáver de Adalberto Pichardo Martínez (Otto) que luego fue remitido al Instituto regional de Ciencias Forenses en Santiago por ordenes del procurador fiscal de Sosúa, licenciado Ramón Cabrera Veras.
Este hecho trágico ha causado consternación en este municipio turístico debido a que Adalberto Pichardo Martínez (Otto), era un conocido servidor público que laboró por varios años en el cabildo local.
En tanto que el hijo de la víctima José Alberto Pichardo (Baberto), fue ingresado en estado grave de salud a un centro medico de Puerto Plata donde se requerían donantes de sangre B + para poder realizarse la intervención quirúrgica, que según se supo sería determinante para preservarle la vida.
