VENEZUELA.- Mario Silva es un chavista recalcitrante y una cara muy conocida dentro del movimiento.
Conduce el programa La hojilla, que se emite por las noches en el canal oficial, Venezolana de Televisión.
Es uno de los ‘comunicadores alternativos’, como los llamó el propio Chávez, que desde 2002 comenzaron a aparecer en los medios oficiales con el fin de hacer contrapeso a los “intereses desestabilizadores” de los medios privados.
Fue una consecuencia del fallido golpe de Estado de 2002 contra la Revolución Bolivariana.
Silva es popular entre la gente y su audiencia espera sus anuncios, sus críticas, sus palabras cáusticas para la oposición y, valga decirlo, sus insultos.
Sin embargo, de acuerdo con una grabación publicada por el diputado opositor Ismael García, su actual situación personal con el chavismo no parece ser la mejor y dicha realidad tiene nombre propio: Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional.
La grabación es una conversación entre Silva y Aramis Palacio, teniente coronel del G2 cubano.
De acuerdo con la versión del diputado García, el audio —tanto Silva como Palacio tienen conciencia de que su conversación está siendo grabada— iba a ser enviado al presidente de Cuba, Raúl Castro.
No obstante, a juzgar por su contenido y por las propias palabras del ‘comunicador alternativo’, se puede percibir algún ánimo de denuncia en Silva, una suerte de primer paso para recomponer el camino de la Revolución Bolivariana que Cabello estaría poniendo en peligro.
Las palabras de él son claras: Cabello, a través de su hermano, controla la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), desde donde se estarían blanqueando fondos. Además, el presidente de la Asamblea Nacional también tendría influencia en ciertos sectores de las Fuerzas Armadas y la Policía, lo que aumenta el riesgo de una campaña de desestabilización en contra del gobierno de Nicolás Maduro.
Palabras de Silva: “Te lo estoy diciendo, eso que está pasando hoy, Palacios, eso que está pasando hoy lo está permitiendo Diosdado Cabello, porque a él no le importa un coño’elamadre, a él lo que le interesan son los reales y el poder. Y todos los que están detrás, viendo a ver cómo hacen, encierran a Maduro, lo enamoran y lo joden”.
Silva reconoce que una buena parte del gabinete del presidente Maduro no tiene las capacidades para asumir las carteras encomendadas, “y lo más probable es que estén robando, Palacios, porque creen que esto se va a desmoronar”.
Según él, durante la campaña, Diosdado habría ayudado a la oposición a acuñar la sentencia “Maduro no es Chávez” y habría puesto ciertas trampas para que el hoy presidente dijera: “no, no tengo capacidad para hacer esto”, y se crearan las condiciones para que el presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello, fuera el candidato y entrara él a gobernar”. Pero como esto no ocurrió, ahora Cabello parece interesado en sacar del ministerio de Defensa actual al general Diego Molero para poder configurar un golpe de estado con la anuencia de las Fuerzas Militares.
Las elecciones no estuvieron exentas de la conversación: “Más peligrosa era la oposición con dos puntos por debajo, que con dos puntos por arriba (…)”. “¿Qué generaba la reacción de todo ese 70 o 60% que tenemos en los barrios? Que hubiese ganado con un punto y medio. Y ahí sí venía la guerra. Y la oposición no fue güevona, se tiraron para atrás y dijeron: No, vamos a llegar a punto y medio y sigue la conspiración. ¿Por qué? Puedo tumbarlo ahorita o en su defecto, en dos años y medio, por mala administración, por corrupción, por ineficiencia, por toda mierda, yo le tiro un revocatorio”. Mario Silva reconoce que el día de las elecciones hubo más de 45.000 ataques en internet.
“Mi comandante Fidel (Castro) me dijo a mí en una oportunidad, y él tiene que recordarlo, porque esa fue una de las reuniones que yo tuve con él. Me dijo que él no entendía por qué aún el comandante Chávez no había terminado con las elecciones burguesas. Porque el pueblo se equivocaba y yo estoy absolutamente de acuerdo”, asegura Silva en el audio.
El conductor de La hojilla afirma que otro de los intereses de Diosdado Cabello es terminar con “la hermandad” y los acuerdos que se tienen con Cuba: “en el momento en que se desvinculen se acabó Barrio Adentro, se acabaron los hospitales, se acabó la salud, se acabó la educación, se acabó toda mierda (…) Se acabó la inteligencia misma”.
La conversación entre Silva y Palacios toca diversos temas e incluso menciona que Maduro le había dicho al presentador que en el Cuartel de la Montaña, a dos días de las elecciones, su rostro se había aparecido entre las manos de un retrato de Hugo Chávez, como si se tratara de un milagro. Silva, quien fue incrédulo de esa versión, asegura que no publicó dicha información porque Jorge Rodríguez, jefe de campaña del oficialismo, le pidió no hacerlo porque la gente podría pensar que Maduro estaba loco y no votarían por él.
Sin embargo, el tema de Cabello iba y venía y en la parte final se evidenció cuál es la opinión de Silva, quien se declara deprimido por lo que insinúa como la oscuridad existente dentro del chavismo. A su parecer : “Maduro está obligado, está obligado a seguir la senda del comandante; y está obligado a poner contra la pared a Diosdado Cabello. Obligado”.
Luego de que la grabación fuera publicada, Mario Silva la calificó como un “buen montaje”.