POR JHONNY TRINIDAD
NUEVA YORK.- Tras ser cuestionado por la comisión especial de la Cámara de Diputados, el juez de la Junta Central Electoral (JCE), Eddy Olivares, recibió un masivo apoyo de decenas de profesionales, amigos y relacionados residentes en esta ciudad.
En un documento remitido a este redactor, destacaron que Olivares ha jugado un papel estelar y con moralidad por los dominicanos más necesitados.
Agregaron, asimismo, que el juez «siempre se ha mantenido al lado de los que viven en la extrema pobreza, acercándose a los indigentes de los vecindarios de nuestra sociedad, sin importar a que grupos étnicos pertenecen».
Indicaron que «a través de su trayectoria, Olivares se ha manejado de manera pulcra y, sobre todo, pensando a quién puede ayudar, a quíen puede, desde su posición, resolverle un problema».
«Ya es hora de que empecemos a valorar a nuestros grandes hombres, ya es hora de que personas como el magistrado Eddy Olivares, sean reconocidos y enarbolados por el pueblo dominicano», afirmaron.
Añadieron que «por esa y otras razones, los amigos y relacionados de Olivares pedimos que paren de coactar el trabajo de nuestros voceros ante los insensatos, insensibles e indolentes».
En ese sentido, describieron al magistrado como un hombre que solo hace uso de su humildad y capacidad intelectual «para que en la República Dominicana tengamos gentes preparadas, que en el futuro nos puedan servír a todos».
Entre los que firmaron el documento figuran la doctora Jacqueline Del Oleo, licenciado Héctor j. Díaz, ingeniero Ly Lorenzo Abreu, entre otros.
Hace poco, Olivares, quien ha protagonizado una serie de altercados con el presidente de la JCE, Roberto Rosario, por la forma en que éste último se ha manejado en torno a la entrega de actas a extranjeros, calificó como una «página funesta» de la Junta, la negativa de entregarle documentación a más de 22 mil dominicanos de ascendencia haitiana.
Afirmó que «esas personas son dominicanos, porque nacieron y se criaron en el país, nunca han visitado Haití y, en consecuencia, esa nación nunca les defenderá, porque no pertenecen a ella».