NEW YORK.- El cofundador de la famosa empresa de helados Ben & Jerry’s, Ben Cohen, se instaló este martes durante dos horas en una plaza de Nueva York para regalar a los transeúntes cientos de billetes de dólar en los que imprimió mensajes contra la corrupción en Washington.
«En Estados Unidos no tenemos buenas regulaciones medioambientales o políticas energéticas y todo es porque las grandes corporaciones están pagando a los políticos para que no se aprueben leyes que mejoren la situación», dijo.
Ataviado con una camiseta en la que se podía leer «El sistema no está roto, está amañado», Cohen aparcó en la plaza Union Square su «Amend-O-Matic StampMobile», una furgoneta que arrastra un gigante mecanismo de aspecto circense con el que imprime diferentes lemas en billetes de dólar que después regala a los viandantes.
La máquina, en la que se puede ver una gran careta de un hombre al que de manera intermitente le sale un fajo de billetes por la boca, va imprimiendo en los billetes de dólar lemas como «No utilizarse para sobornar a políticos» o
«Imprime tu dinero para sacarlo de los políticos».
El singular automóvil atrajo a decenas de neoyorquinos que, además de recibir los dólares que imprimía Cohen con el mecanismo, también entregaban sus propios billetes para que quedasen estampados, aunque no sin una gran dosis de incredulidad ante esta protesta tan poco común.
«A cualquier persona que le llegue este dólar verá el mensaje y se dirá a sí mismo que no pertenece a los políticos. Los políticos deberían ser lo que son y no lo que la gente que les da dinero quiere que sean», dijo el neoyorquino
Patrick Malone sujetando uno de esos «panfletos».
El empresario asegura que un 80 % de los estadounidenses, unos 120 congresistas, 15 estados y hasta el propio presidente Barack Obama han expresado su apoyo a enmendar la Constitución para clarificar que «el dinero no es libre expresión» y que «las corporaciones no son personas».
La campaña lucha contra la controvertida decisión tomada en 2010 por el Tribunal Supremo de Estados Unidos, que permitió la creación de los llamados «superPACs», organizaciones que pueden captar fondos ilimitados de personas y empresas para canalizarlas a objetivos políticos.
Para propagar su mensaje, Cohen está llevando su mecanismo de impresión de billetes a diferentes puntos del país y utiliza esta vía «porque cuando pones un billete en circulación, 875 personas lo ven a medida que va pasando de manos, así que de alguna forma es una petición en esteroides».
En su «Amend-O-Matic StampMobile» y en su página web, Cohen también vende sellos de goma para que cada uno pueda grabar esos lemas anticorrupción en todos los billetes que quieran y afirma haber vendido ya más de 8.000.