WASHINGTON.- El mundo real se queda pequeño para Barack Obama y el papa Francisco, quienes son líderes en el mundo virtual de la red social Twitter, convertida en uno de los elementos clave para llegar al público.
Obama y el papa Francisco son los reyes este año de lo que un estudio publicado en Ginebra denomina la «Twiplomacia», una herramienta que permite a los líderes mundiales dar a conocer su mensaje a una audiencia creciente y a los ciudadanos, al menos en teoría, tener acceso a sus gobernantes.
El presidente estadounidense es el líder indiscutible de esta red social, donde su cuenta particular (@BarackObama) -con más de 33 millones de «followers»- es la más seguida del mundo, señala el informe «Twiplomacy 2013» publicado en Ginebra por la empresa de relaciones públicas Burson-Marsteller.
El dominio de la política norteamericana en el mundo no queda ahí y es que la cuenta de la Casa Blanca (@WhiteHouse) -con unos cuatro millones- es la tercera con más seguidores del planeta.
Sin embargo, a pesar de que estas cuentas sean seguidas por un tercio de los líderes políticos y gobiernos en el mundo, Obama no utiliza Twitter para establecer conexiones con sus homólogos.
«La cuenta @BarackObama sólo sigue a los primeros ministros de Noruega, Jens Stoltenberg, y Rusia, Dmitri Medvedev. @WhiteHouse sólo sigue a tres líderes mundiales», recoge el informe.
La gran revelación de este año ha sido la utilización de Twitter por parte del máximo representante de la Iglesia católica, con la que ha intentado dar un vuelco a las formas tradicionales de la institución para trasmitir su mensaje.
El perfil @Pontifex, con más de nueve cuentas en distintos idiomas, se abrió el diciembre del año 2012 bajo el pontificado de Benedicto XVI; ahora, a cargo del papa Francisco, ha logrado ser la segunda más seguida del mundo con siete millones de «followers».
Además, la cuenta del Papa es una de las más influyentes del mundo y sus tuits, especialmente en la cuenta de lengua española, son retuiteados una media de 11.000 veces; mientras que los de Obama, sólo una media de 2.300 veces a pesar de casi quintuplicar al pontífice en número de seguidores.
Los puestos cuarto y quinto en cuanto al número de seguidores los ocupan el presidente de Turquía, Addullah Gül, y el primer ministro de este país, Recep Tayyip Erdogan, cada uno con más de 3,4 millones de seguidores.
Por otro lado, el estudio muestra que más de tres cuartas partes de los líderes mundiales poseen su cuenta en Twitter (un 77,7 %) y entre ellos dos terceras partes (un 68 %) establecen conexiones mutuas con sus homólogos.
Entre los líderes mejor conectados destacan el ministro sueco de Asuntos Exteriores, Carl Bildt, con 44 líderes a los que sigue y le siguen a él; seguido del Servicio Europeo de Acción Exterior y los ministerios de Asuntos Exteriores de Polonia, Reino Unido y Francia.
Por otra parte, el primer ministro de Uganda, Amama Mbabazi, es uno de los que establecen más conversaciones en la red social y responde al 96 % de los tuits que lo mencionan.
«El documento ilustra cómo Twitter y los medios de comunicación social se han convertido en una parte importante de la comunicación en los gobiernos», declaró el director general de Burson-Marsteller para Europa, Oriente Medio y África, Jeremy Galbraith.
A pesar de esta importancia concedida por parte de los líderes políticos a la comunicación en las redes sociales, aún siguen utilizándola mayoritariamente de forma unidireccional y un total de 42 cuentas entre las 505 analizadas de 153 países distintos no siguen a ninguno otro perfil de Twitter.