Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ La familia del bodeguero dom inicano Reynaldo Cuevas, asesinado por un policía de la ciudad en medio de un confuso incidente cuando cuatro atracadores asaltaron el negocio en el que tgrabajaba la víctima, demandaron a la ciudad y al Departamento de Policía por $25 millones de dólares.
El agente que mató a Cuevas no fue procesado por la fiscalía de El Bronx ni se convocó un Gran Jurado para que determinara si había causa probable para acusarlo por el crimen del inmigrante dominicano.
«Ya que no se hizo justicia criminal en el caso del asesinato de mi hijo, por lo menos que se haga justicia civil para darles un buen furuto a mi nieta», dijo entre sollozos la señora Ana Milagros Cuevas, madre de la víctima.
El bodeguero criollo estaba trabajando en la bodega en el momento en que los atracadores llegaron al negocio y anunciaron el asalto.
Cuando los criminales se enteraron de que la policía había rodeado el local salieron corriendo por una puerta trasera, pero Cuevas y otro empleado lo hicieron por la del frente.
Cuando el dominicano corría, tratando de protegerse de los atracadores, fue interceptado por el policía quien lo tumbó al pavimento y allí le disparó.
La policía alega que Cuevas fue muerto debido a que el oficial que le disparó, lo confundió con uno de los atracadores.
Marchas, vigilias y protestas reclamando que el agente fuera acusado, se realizaron en El Bronx pero el Fiscal del Distrito Robert T. Johnson no cedió y rehusó acusar al agente.
El incidente en el que murió Cuevas que tenía 20 años de edadl, ocurrió el 7 de septiembre del 2012 cuando se desarrollaba el atraco a la bodega «Aneurys Deli Grocery».
La familia sindica al policía Ramysh Bangali como el oficial que mató a Cuevas. La escena quedó grabada en una cámara de seguridad y el video fue ampliamente difundido.
La demanda, interpuesta en la Corte Suprema el 6 de agosto de este año, está sometida por la madre de la víctima y la niña Jamie Nicole Cuevas de 4 años de edad, hija del bodeguero asesinado.
La madre de 52 años de edad y desempleada, dijo en una conferencia de prensa en la que se anunció la demanda que aunque el dinero no le devolverá a su hijo por lo menos ayudará a terminar de criar con tranquilidad a su nieta que en este momento está viviendo en la República Dominicana.
«Cuando hablo con Jamie (mi nieta), siempre me pregunta por su papá y que cuando la va a visitar», explicó la madre entre prolongados sollozos.
«La mamá le ha dicho que su padre ha muerto y que está cuidándola desde el cielo, pero la niña es muy pequeña por lo que no entiende nada de eso», añadió la señora Cuevas.
El abogado de la familia, Stanford Rubeinstein dijo que ahora le corresponderá a un jurado integrado por residentes de El Bronx decidir qué hacer con el futuro de la niña.
«La actuación del oficial Bangali, fue obviamente temeraria, negligente y descuidada», sostuvo el abogado.
La señora Cuevas se mostró en desacuerdo con las prácticas de la policía, porque son discriminatorias y señaló que aunque todavía no sabe por quien va a votar para la alcaldía, la ciudad necesita un ejecutivo que tome en cuenta a los hispanos y otras minorías.
«El candidato ideal será aquel quye ayude a que se acabe con la discriminación y que cambie la forma en que cualquier policía tenga el dedo en el gatillo y se varíe la manera en que trabaja el departamento», agregó la madre dominicana.
La Oficina Legal de la ciudad dijo que todavía no han recibido la notificación oficial de la demanda por lo que no tiene comentarios al respecto.