Por Luciano Bertozzo
Atracos, violaciones, homicidios, violencia intrafamiliar, feminicidios, acciones vandálicas.
¿Por qué nuestra sociedad se torna cada día más violenta?
¿Es la violencia una actitud individual?
¿Es determinada por factores familiares?
¿Se manifiesta y es prerrogativa de los sectores marginales e invade el resto de la sociedad?
¿En qué medida el auge de la violencia está vinculado a una progresiva pérdida de la cohesión social?
Tal vez no es la pobreza en si misma que alimenta la violencia, sino la brecha cada día más amplia entre los sectores de nuestra sociedad, la distancia social que cada día se hace más grande entre grupos y entre personas. Estamos en un sistema que propone modelos y estilos de vida inalcanzables por la mayoría de la población.
Las clases altas cada día viven más lejos de los sectores medios, cada día más los sectores pobres se concentran en espacios propios alejados espacial y simbólicamente del centro de la ciudad. Hay amplios sectores rurales marginales que viven, podríamos decir, en un mundo aparte.
Sectores barriales que han construido una nueva economía basada en la ilegalidad cuya vinculación con la economía formal, si bien existe, no es evidente.
Es un proceso que se ha fortalecido en los últimos diez o veinte años, a la par de un cada vez mayor auge de violencia. Vivimos en una multiplicidad de mundos incomunicados que aumentan la distancia social, hacen más débiles los lazos de solidaridad y de responsabilidad colectiva (no hay ni proyectos ni valores compartidos).
El modelo actual para ser sustentable hace énfasis en el consumo individual.
El reconocimiento social proviene en este contexto del poseer primero las cosas y después las personas… y esto se logra o con el dinero, con la violencia o con ambos a la vez.
Un modelo de desarrollo que cada día hace mas difícil la solidaridad y propone el tener como valor, inevitablemente produce violencia.
La violencia no nace y no es prerrogativa de un sector social, está adentro del esquema de relación entre las personas y entre los grupos sociales y nos permea de diferente manera a todos.
