Por Acólitos Anónimos
Literalmente la verdad es el conocimiento de lo que es, lo real, lo honesto y la buena fe. Hay quienes adquieren inteligencia para hacer uso de la verdad. La realidad es que mientras más conocemos la verdad más nos alejamos de ella. La honestidad debe ser una condición sine qua non que debería primar en cada una de nuestras acciones. Es más fácil llegar a la verdad cuando se actúa de buena fe.
Muchos creen que por pertenecer a una clase social, política o religiosa están autorizadas hablar con la verdad, a diario vemos y escuchamos como se cuestiona la vida de personajes que deberían ser iconos, símbolos y ejemplos de la sociedad.
La justicia Dominicana ha hecho de la verdad el instrumento menos creíble y contradictorio, tal es el caso del conflicto suscitado por representantes y dadores de justicia de nuestro país, hostilidad esta, que podría dejar una brecha de contradicciones en el pensamiento de cada dominicano.
La verdad tiene que ser como el acero que no se dobla, como el agua de los ríos que siempre busca su cauce, mientras más atados y comprometidos estemos con la verdad, mayores serán nuestros ideales.
La verdad, debe consumirse a diario en cualquiera del escenario de la vida nacional, la verdad, debe permear los hogares sin importar la naturaleza ni de donde provenga, el Dios del universo dice, conoceréis la verdad y la verdad os hará libres. Amén.