SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- Tras finalizar la 520 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), los obispos de la República Dominicana denunciaron este viernes el clima de inseguridad, de violencia creciente frente al flagelo del narcotráfico y el sicariato, que sigue minando la sociedad dominicana.
Los prelados católicos exhortaron a todos los fieles y a toda persona de buena voluntad a no tener miedo, a luchar sin desmayo por la paz social y el respeto a la naturaleza y el medio ambiente.
Hicieron un llamado a la unión para combatir las fuerzas del mal y a mantener viva la esperanza de un futuro mejor.
Dijeron que “hoy más que nunca se requiere de hombres y mujeres que sepan poner su mirada más allá de las circunstancias presentes, que actúen en base a valores fundamentales, sin dejarse aplastar por los ambientes y corrientes actuales que promueven la cultura de la muerte; que perseverando en la fe y la esperanza orienten sus vidas, y las de los que les rodean, hacia la conquista de sus más nobles ideales”.
Felicitaron a todos los fieles de las Diócesis y Arquidiócesis, y a toda la sociedad dominicana, y a la vez agradecieron sus fervientes oraciones.
Asimismo, ratificaron su fe y esperanza y animaron al pueblo dominicano a tener el coraje que se exige ante el clima de inseguridad y violencia que se viven en el país.
Cada Asamblea Plenaria del Episcopado Dominicano inicia con la Solemne Eucaristía en la festividad de San Pedro y San Pablo, dedicada al Santo Padre, e incluye una jornada de Retiro Espiritual, que en esta ocasión fue dirigida por el Rvdo. P. Darío Taveras, MSC, con el tema: Las Miradas de Jesús sobre los Pastores de la Iglesia.
“Expresamos su adhesión al Magisterio del Santo Padre Francisco, y a las directrices de la Santa Sede, que los invita a ser parte de una “Iglesia en salida”, a no tener miedo ante la situación actual y a “no permitir que nos quiten la esperanza”, destacaron.
Acorde con estas exhortaciones del Papa y en sintonía con el magisterio de la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano y del Caribe (Aparecida), los obispos dominicanos asumieron el llamado a la “Conversión Pastoral” e invitaron también a todos los agentes de pastoral a renovar su ardor y celo apostólico.
Organigrama reestructurado 2014-2017
En esta Asamblea Plenaria, tratando de renovar sus energías y continuar con su mejor servicio al pueblo de Dios, manifestaron su decisión de ser signo de unidad, en un ambiente de comunión eclesial, y eligieron los os responsables de los distintos servicios al interior de la Conferencia.
En la presidencia de la CED fueron elegidos además de Nicanor Peña como presidente; José Dolores Grullón, obispo de San Juan de la Maguana, como vicepresidente.
Por otro lado, fue reelecto Carmelo Santana, de la diócesis de San Francisco de Macorís, como secretario general, y José Joaquín Domínguez, de la diócesis de Baní, como secretario general adjunto.
El Consejo Permanente quedó integrado por el presidente, el vicepresidente, los secretarios generales y Freddy Antonio Bretón, Obispo de Baní, y Fausto Ramón Mejía, obispo de San Francisco de Macorís.
En la Comisión Económica y Financiera fueron elegidos Julio César Corniel, obispo de Puerto Plata, Diómedes Espinal, obispo de Mao-Montecristi, y Víctor Emilio Masalles, obispo auxiliar de Santo Domingo.
Durante la asamblea, además de las elecciones de la CED, se trataron temas como el diálogo con representantes de la Unión Nacional de Escuelas Católicas (UNEC), donde los eclesiásticos reflexionaron sobre la situación actual de las escuelas católicas, colegios y la tanda extendida.
También trataron el diálogo con el ministro de Salud Pública sobre las enfermedades contagiosas y epidémicas; así como el informe anual del Instituto Nacional de Pastoral y del Programa de Alfabetización Nacional «Quisqueya Aprende Contigo».
Entre los asuntos que se trató estaba también la próxima Asamblea General del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), a celebrarse en Santo Domingo del 12 al 15 de mayo de 2015.
La CED señaló que el nuevo organigrama fue reestructurado para el periodo 2014-2017, y que fueron organizadas las presidencias de las seis comisiones episcopales, 24 nacionales y cinco especiales, y de las instituciones de la CED.
«Esta nueva reorganización garantizará una mejor coordinación para facilitar el trabajo de los diversos organismos que componen la Conferencia del Episcopado Dominicano» apuntó la institución.
Asimismo, la CED llamó a tener «coraje» frente al clima de inseguridad, de violencia creciente y frente al flagelo del narcotráfico y el sicariato, que sigue minando la sociedad dominicana.
«Exhortamos a todos nuestros fieles y a toda persona de buena voluntad a no tener miedo, a luchar sin desmayo por la paz social y el respeto a la naturaleza y el medio ambiente, a unirnos todos en el combate contra las fuerzas del mal y a mantener viva la esperanza de un futuro mejor» expresó la CED.
Danilo Medina felicita a Peña y Grullón por elección en la CED
El presidente Danilo Medina felicitó al obispo de la Diócesis de Nuestra Señora de La Altagracia, monseñor Nicanor Peña Rodríguez, por su elección como presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED). Igualmente el jefe de Estado congratuló, en nombre del Gobierno y en el suyo propio, al obispo de la Diócesis de San Juan de la Maguana, monseñor José Dolores Grullón Estrella, por su elección como vicepresidente del organismo eclesiástico.
Ambos prelados fueron escogidos para tales posiciones en la Quincuagésima Segunda Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Dominicano, por cuanto el Primer Mandatario de la Nación hizo extensivas las congratulaciones a los integrantes del Consejo Permanente y de las Comisiones Especiales.
En sendas misivas individuales, el Presidente de la República le expresa a monseñor Nicanor Peña Rodríguez, que ruega a Dios por un fructífero ejercicio al frente de ese importante estamento de la Iglesia Católica, “pidiéndole que el Espíritu Santo provea de la fortaleza y sabiduría necesarias para llevar adelante la tarea pastoral encomendada, al servicio de la paz, la justicia, la solidaridad y dignidad de nuestro pueblo”.
Mientras a Dolores Grullón le afirmó su deseo de cumplir con un ejercicio, “que le permita continuar su labor pastoral con el éxito que siempre ha tenido en las misiones encomendadas en beneficio del pueblo”.