PUERTO PRINCIPE.- Organizaciones políticas opositoras en Haití anunciaron que los próximos 8, 10 y 11 de enero protagonizarán la fase final de una de serie de protestas que han llevado a cabo en las calles y con las que buscan la renuncia del presidente Michell Martelly, informaron hoy los medios locales.
Los grupos opositores llamaron a la población a sumarse a dichas manifestaciones que tendrán lugar durante tres días en Puerto Príncipe.
En este sentido, las protestas continuarán a pesar de los recientes acontecimientos ocurridos en el país, como fue la dimisión del primer ministro, Laurent Lamothe, por recomendación de una comisión consultiva presidencial, algo que los opositores han exigido en las calles casi a diario durante los últimos meses, al igual que la renuncia de Martelly y la convocatoria de elecciones.
Dicha comisión fue creada por el jefe de Estado para resolver la crisis política, provocada por las diferencias entre el Ejecutivo y el Legislativo, que han aplazado los últimos años las elecciones municipales y legislativas, la última vez el pasado 26 de octubre. No obstante, los representantes de los tres poderes del Estado firmaron el 29 de diciembre pasado un pacto en el que establecieron una serie de compromisos, entre ellos prolongar los mandatos de los diputados hasta el 24 de abril y de los senadores hasta el 9 de septiembre, ya que terminaban el próximo 12 de enero.
Sin embargo, según lo pactado, el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial tendrán solo hasta el 12 de enero próximo, fecha en la que también vencerá el acuerdo tripartito, para llevar a cabo los compromisos asumidos en el mismo, ya que de lo contrario quedará anulado. El país ayer tropezó con un primer escollo en sus intentos por normalizar la situación política cuando la Asamblea Nacional fracasó en reunir el quórum necesario para abordar los asuntos del acuerdo tripartito, entre los que estaba la ratificación de la política estratégica de Evans Paul, primer ministro designado por decreto por Martelly, y la votación de la Ley Electoral.
Además, estaba prevista ayer la ceremonia de juramentación de Evans Paul como primer ministro pero esta fue aplazada, según el portavoz de la Presidencia, Lucien Jura, porque había “algunos ajustes” por hacer en lo que se refiere al Gobierno de consenso y su declaración de política general debe ser ratificada por el Parlamento.
Partidos opositores como Fusión de los Socialdemócratas han denunciado la designación de Paul y el acuerdo tripartito alcanzado. La presidenta de esa organización, Edmonde Supplice Beauzile, opinó que el acuerdo suscrito por los tres poderes del Estado es “un engaño” y no augura “nada bueno”. Por otro lado, el senador Jean-Baptiste Bien-Aimé criticó ayer en la radio local que Martelly tenga 452 asesores en el Palacio Nacional, así como la forma en que nombró a Paul como nuevo primer ministro.