Ministerio Cultura dispone agilizar el reacondicionamiento del Fuerte de San Gil

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Fuerte San Gil
Fuerte San Gil

SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- Los trabajos de reacondicionamiento del Fuerte San Gil marchan de manera acelerada y serán concluidos en el mes de agosto, según informó la Dirección de Patrimonio Cultural, dependencia del Ministerio de Cultura.

Además, se anunció que la reparación de la obra tiene un costo de RD$2, 000,000 (dos millones de pesos) y está a cargo de los arquitectos Orquídea Martín de Almánzar y Nelson Taveras Fermín.

A las tareas de rescate del también llamado «Fuerte del Matadero”, se ha sumado un amplio equipo de trabajadores que le devolverán el esplendor a este monumento ubicado próximo al “Obelisco Hembra”, de la avenida George Washington de Santo Domingo.

Las labores de reacondicionamiento en este lugar histórico forman parte de un amplio programa que ha dispuesto el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez, el cual incluye a otros monumentos históricos de la Ciudad Colonial de Santo Domingo.

Intervención

El Fuerte de San Gil está siendo intervenido a través del «Programa Especial de Obras del Fondo para la Protección de la Ciudad Colonial de Santo Domingo (FONDO), dispuesto por el Ministerio de Cultura.

El proyecto de rehabilitación se inició con el objetivo de poner este monumento en óptimas condiciones para darle un uso adecuado.

Las reparaciones a ejecutarse consisten, básicamente, en la recuperación de algunas partes del fuerte que fueron demolidas, la eliminación de algunos elementos agregados, la construcción de dos baterías de sanitarios en un área que había sido excavada dentro del fuerte, la reparación y limpieza de las superficies del fuerte y las instalaciones eléctricas y sanitarias. Además, se construye una escalera en madera para comunicar los dos niveles del fuerte.

Estas remodelaciones se iniciaron en mayo pasado y terminarán a principios de agosto.

El monumento lleva su nombre en honor a San Egidio, o San Gil, un ermitaño de origen griego que vivió entre los siglos VI y VII, y que peregrinó desde África a Francia defendiendo la fe cristiana.

En sus inicios, el monumento fue una torreta circular, construida posiblemente en el 1543, por el tiempo que se erigían los muros de la ciudad de Santo Domingo.