SANTO DOMINGO DE GUZMA, RD.- El presidente Danilo Medina se propone reducir la pobreza general, entre otras cosas, en un 25%, pasando de 31.5% a 23.6% de la población, durante el período constitucional 2016-2020, que se inicia el próximo 16 de agosto
Los datos en ese sentido aparecen consignados en el programa de gobierno que presentara al electorado en la pasada campaña electoral el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), donde se precisa que esto representa que, adicionalmente a lo ya logrado, 830 mil personas más saldrán de la pobreza monetaria.
Significa, asimismo, que la próxima administración trabajará para reducir la tasa de pobreza extrema en un 50%, pasando de 6.8% a 3.4% de la población, lo que representa que 360 mil personas superen la pobreza extrema en el próximo período gubernamental, que encabezará el actual jefe de Estado.
“Aumentaremos la clase media en un millón de personas, pasando de 28.3% a 37.9% de la población, mientras que también se propone eliminar los pisos de tierra y los servicios sanitarios precarios”, destaca el programa de gobierno del PLD.
Además, durante el período 2016-2020, el gobierno se propone reducir el subregistro y la falta de documentos de identidad para abrir más oportunidades de progreso a la gente, aumentando el registro oportuno al 100%, con el propósito de ir avanzando hacia la plena documentación de los niños y niñas en nuestro país.
“Aseguraremos que a ningún dominicano o dominicana de falte la alimentación básica”, indica.
También destaca que durante 2016-2020, el gobierno se conformará un padrón único de beneficiarios de las políticas sociales, articulando en un sistema integrado las diferentes plataformas existentes: Sistema Único de Beneficiarios (Siuben), Sistema de Indicadores Sociales (Sisdom) del Ministerio de Economía, Sistema Nacional de Indicadores para el Desarrollo (Sinid) de la Oficina Nacional de Estadística, y los diversos sistemas sectoriales de información.
Detalla, además, que en la venidera administración gubernamental del presidente Medina, desarrollará un sistema de ventanilla única de servicios y provisiones sociales, como un canal único de comunicación y un medio directo de detección de necesidades de la población.
“Reformaremos la arquitectura institucional del sector social de modo que aumente la eficacia de las políticas y se elimine la dispersión y redundancia organizacional”, resalta.
