SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- El secretario general del Partido Revolucionario Dominicano admitió que muchos dirigentes y militantes de esa organización política se sienten burlados por el trato recibido en la alianza con el Partido de la Liberación Dominicana.
Tony Peña Guaba dijo también que no llegan a dos mil los miembros del PRD que han sido nombrados en el gobierno peledeista que encabeza el presidente Danilo Medina.
Tony Peña criticó la corrupción, el endeudamiento externo y la política migratoria que lleva a cabo este gobierno.
Dijo que el PRD ha iniciado un proceso de reestructuración a nivel nacional con miras a fortalecerse, porque en su caso particular quiere que el PRD acuda solo a los comicios del 2020, y en caso de una eventual alianza con cualquier organización que sea desde una posición de mucho más fortaleza.
“Los perredeistas se sienten un poco burlados, porque no han podido ser parte fundamental del gobierno, los perredeistas tienen menos de dos mil empleos, si esa es la realidad, menos de dos mil empleos“, remachó Tony Peña Guaba.
El secretario general del Partido Revolucionario Dominicano agregó que hay provincias y municipios donde no se ha nombrado un solo militante de esa entidad política.
“Ponle 600 o 700 en Portuaria, 300 en la Cancillería, 300 donde está el compañero Julio Maríñez, 60 0 70 en la Junta de Aviación Civil, ciento y pico en el Ministerio de la Mujer, y menos de cien que se nombró en el Instituto Dominicano de Seguros Sociales, no hay otra dependencia, esos son, no hay más“, detalló Peña Guaba.
Agregó que se está haciendo un gran esfuerzo de parte de la dirección del partido, específicamente de parte de su presidente, Miguel Vargas Maldonado, y del secretario de Organización, de ayudar un poco para ver si se incorpora una cantidad de perredeistas, pero insistió en que hasta ahora ha sido insuficiente.
Aclaró que en lo que personalmente a él se refiere no forma parte de esa comisión, ya que no apoyo la alianza como tal, sino que salió hacer campaña por los candidatos a cargos congresuales y municipales que presentó su partido en los pasados comicios.
“Independientemente de eso, no hay nada malo que no tenga cosa buena, es que tenemos un buen canciller, porque Miguel Vargas Maldonado ha demostrado que es un canciller de lujo que se gasta éste gobierno“, señaló.
Sostuvo que se puede estar a favor o en contra de Vargas Maldonado, pero solamente los mezquinos son que pueden decir que el presidente del PRD no ha sido un buen canciller.
Argumentó que lo mismo se puede decir del trabajo del Ministerio de la Mujer, Aviación Civil y, para él, en sentido general los funcionarios del Partido Revolucionario Dominicano han dado la talla.
Critica la corrupción y endeudamiento externo
Tony Peña Guaba aseguró que la gente está cansada de la forma clientelar como se maneja la actividad política en la República Dominicana, que no resuelve los problemas nacionales, a la vez que criticó la corrupción en la administración pública.
“Es verdad que la corrupción es galopante en el gobierno, en todos los gobiernos y en este también, yo no voy hablar mentira y tengo que decir las cosas como son“, sentenció el secretario general del Partido Revolucionario Dominicano.
Admitió que la presente gestión tiene sus aciertos, sobre todo en materia de educación , pero dijo que hay que revisar si el país está en condiciones de seguir otorgándole el cuatro por ciento a ese sector, y se cuestionó en el sentido de qué se va hacer con ese dinero cuando no haya que construir más escuelas.
También llamó a frenar la política de endeudamiento externo que ejecuta la administración del presidente Danilo Medina.
“Ahora la política de endeudamiento yo no la puedo aplaudir porque va a llegar un momento en que van a venir y nos van a embargar sin darnos cuentas, porque aquí todo el mundo vamos a deber dinero sin darnos cuenta, ya un estudio dice que cada dominicano debemos dos mil y pico de dólares, y eso no puede ser“, criticó el dirigente político.
Precisó que ya se está hablando de que ya el país ha pasado sobre el umbral del 50 por ciento del Producto Interno Bruto con respeto al monto de la deuda, y aclaró que no se puede llegar a un default.
Explicó que en vista de la gravedad del problema, él, conjuntamente con un grupo de técnicos y economistas están trabajando en un proyecto de ley para que el país solo tome como préstamo el 75 por ciento del monto a pagar cada año de su deuda externa.
“Me explico, si para este año hay para el pago de servicio de la deuda pública dos mil millones de dólares, el país no puede tomar prestado más de mil 500 millones de dólares, es decir que siempre tiene que haber una reducción de 0.25 por ciento“, acotó.
Insistió en que con esa fórmula se busca cambiar la actual tendencia del endeudamiento, para que si en el 2019 se pretende pagar tres mil millones de dólares, no se puede tomar empréstitos que superen los dos mil 250 millones.
Advirtió que no puede haber una francachela con los préstamos que muchas veces no resuelven los problemas del país, y que además, según él, hay una búsqueda de algunos sectores económicos y sociales, y el país no puede estar en eso.
Dijo que se ha demostrado que hay préstamo para una construcción que comienza con un porcentaje y termina duplicándose, como el caso de Odebrecht y específicamente Punta Catalina, que ahora esa empresa constructora quiere cobrar 728 millones de dólares adicionales al monto contratado originalmente.
Sobre la posibilidad de que se modifique nuevamente la Constitución de la República para habilitar la relección presidencial del actual mandatario, Peña Guaba dijo que se opone a esa iniciativa.
“Cada cuatro años, los partidos políticos, los legisladores y el presidente de la República no pueden estar cambiando la Constitución de la República, eso es un relajo, es una falta de respeto al pueblo dominicano, y es una falta de respeto a nosotros mismo como país.
En otro orden, Tony Peña Guaba también criticó el manejo que se le está dando a la política migratoria, y llamó a deportar a todo extranjero que éste ilegal en el país, y con respeto a la inmigración de miles de indocumentados haitianos, sostuvo que un país pobre no puede cargar con los problemas de otro más pobre.