SANTO DOMINGO, RD.- Antes de concluir el 2018 quisimos visitar al Gordo de Oro, Freddy Beras Goico, nuestro inolvidable y ejemplarizante amigo.
Oramos por su descanso eterno en un espacio privilegiado de la morada del Divino Creador.
Hablamos como siempre… sin poses ni tapujos…
Le expresamos de la falta que hace en una sociedad que continúa supurando pus.
No olvidamos recordarle de la imperiosa necesidad de su verbo ácido y puntual al servicio de los que más sufren.
A pocos pasos nos escuchaba pensativo el Viejo Corpo, dejando escapar sus lágrimas de solidaridad.
Oramos juntos conformando una trilogía confiada en que el Todopoderoso nos seguirá bendiciendo y permitirá la conformación de una consciencia colectiva y un compromiso social capaz de engendrar, en el año por venir, 2019, una República Dominicana más justa y humana.
Me dijo que así la merecemos y por tanto, debemos construirla.
Nos expresó que bajo ningún concepto dejemos morir la alegría y atropellar las esperanzas.
Gracias Freddy por recibirnos y escucharnos..!! Abrazos Corpo por tu receptividad eterna.
Pero sobretodo, gracias por ser paradigmas de dignidad, solidaridad y fuentes inagotables de amor con los más necesitados.
Por ser… siempre..!!