CARACAS.- En vehículos a prueba de balas y resguardados por personal de las embajadas de México y Estados Unidos, el equipo de periodistas de Univisión que fue retenido en el palacio presidencial de Venezuela por espacio de dos horas y media fue trasladado esta mañana al aeropuerto de Caracas para que salgan expulsados del país suramericano.
Un vídeo publicado por el corresponsal de Univisión, Pedro Ulteras, se observa cómo Jorge Ramos organizaba quiénes estarían en el vehículo de seguridad que se les proveyó para evitar que puedan ser atacadas durante el traslado.
Una vez llegaron al aeropuerto, Ulteras informó en una entrevista con Univision que el avión que los trasladará saldrá al mediodía de hoy de Venezuela.
“Es un proceso largo”, afirmó.
Por su parte, Ramos insistió en que el gobierno venezolano debe entregarles las cámaras y la grabación que contiene los 17 minutos de entrevistas que alcanzó tener con el presidente Nicolás Maduro antes de ser encerrados en un cuarto de seguridad con las luces apagadas.
“Nos están robando nuestro trabajo”, afirmó.
El periodista también contó que le borraron todo su unidad móvil, el cual sí le entregaron esta madrugada, y que tal vez hasta se la hackearon. Dijo que por ello, nunca más utilizará ese celular.
Según trascendió anoche un grupo de periodistas de Univisión, encabezados por Ramos, les confiscaron sus equipos y celulares en el palacio presidencial de Venezuela después de que Maduro se levantó abruptamente de la entrevista.
Ramos, uno de los periodistas de habla hispana más influyentes en Estados Unidos, dijo que Maduro puso fin a la entrevista después de tan solo 17 minutos de preguntas. Dijo que le enfadó que le mostrara en su tableta cuando unos jóvenes venezolanos comían sobrantes de comida de un camión de basura.
“Como de la basura, de la basura, primera vez en mi vida (…) presidente me disculpa, pero usted como presidente no sirve”, dice un hombre identificado como Jesús en el vídeo compartido por el periodista de Univisión, Enrique Acevedo, en su cuenta en Twitter.
El equipo de Univision pudo salir del lugar luego de dos horas, pero sin que se les devolvieran sus teléfonos, material periodístico ni cuatro cámaras, dijo Ramos. Horas después solo devolvieron los celulares.
Al salir de allí, el equipo de Univisión fue escoltado por el Servicio de Inteligencia hasta el hotel donde se hospedaban. Estuvieron vigilados desde ayer hasta esta mañana, cuando comenzó el proceso de deportación.
Durante la entrevista de esta mañana, Ramos explicó que cuando Maduro interrumpió la entrevista le pudo decir lo que sentía.
“No contestar preguntas es lo que hacen los dictadores no los demócratas”, comentó sobre lo que le expresó a Maduro.
“Él (Maduro) quería debatir y al final no aguantó”, añadió.
El gobierno de Venezuela rechazó la versión de Ramos y lo acusó de intentar montar un incidente internacional después de que altos funcionarios del Departamento de Estado y el senador Marco Rubio retransmitieron reportes en redes sociales sobre lo que llamaron la detención de Ramos, al mismo tiempo en que se transmitía una entrevista grabada horas antes con la cadena estadounidense ABC.
“Por Miraflores han pasado centenas de periodistas que han recibido el trato decente que de forma habitual impartimos a quienes vienen a cumplir con el trabajo periodístico”, dijo Jorge Rodríguez, secretario de Comunicación, Turismo y Cultura de Venezuela a través de Twitter.
Además, dijo que el gobierno no se presta para “shows baratos”.
“En el mismo momento en que @ABC publica una entrevista con el Presidente @NicolasMaduro, el Departamento de Estado (de EE.UU.) inventa un nuevo falso positivo con un show y un montaje”, indicó Rodríguez.
Ramos, quien entrevistó en tres ocasiones al mentor de Maduro, Hugo Chávez, dijo que Maduro lo acusó de ponerse del lado de los detractores de su gobierno en la disputa política por el poder que se vive en Venezuela.
Más de 50 gobiernos de todo el mundo han reconocido al líder opositor Juan Guaidó como el gobernante legítimo de Venezuela después de que Maduro tomó posesión para un segundo periodo al frente del país el mes pasado, luego de lo que sus detractores describieron como elecciones ilegítimas.
Previamente Ramos ya había molestado a uno de los principales críticos de Maduro: el presidente de Estados Unidos Donald Trump, quien hizo que sacaran al periodista de una conferencia de prensa durante las elecciones de 2015, después de que le preguntó sobre sus posturas anti migratorias hacia los mexicanos.
No es la primera vez que ocurren retenciones de periodistas en Venezuela, ya que en enero se registraron varias detenciones de trabajadores de la prensa, incluidos cuatro de Efe.
El Sindicato de Prensa contabilizó solo en enero 40 agresiones por parte de cuerpos de seguridad del Estado contra trabajadores de la prensa.
El Ejecutivo de Maduro asegura constantemente que la prensa, particularmente la extranjera, crea “campañas mediáticas” en su contra y les acusa incluso de mentir sobre la situación de crisis que hay en Venezuela.
Además, varios medios de comunicación, nacionales e internacionales, han sido sacados del aire por orden del Gobierno chavista, especialmente al ser críticos con la administración, como CNN en Español en 2017, los colombianos NTN24 en 2014, RCN y Caracol en 2017 y en 2007 el nacional Radio Caracas Televisión (RCTV)