Al usar el teléfono, a menudo no estamos enfocados en una única cosa, sino que estamos realizando múltiples tareas e interactuando en distintas aplicaciones. Esta falta de focalización puede hacer que la nueva información obtenida no se almacene en nuestra memoria a largo plazo,
Varios especialistas y estudios indican que usar constantemente los teléfonos móviles podría afectar a nuestra memoria, en particular, a la memoria a corto plazo.
Según la doctora, al saber que tenemos libre acceso a la información, recordamos los hechos mucho peor que en situaciones en las que el acceso es limitado.
Algunos estudios han mostrado, además, que los niños que usan teléfonos inteligentes presentan una reacción más lenta a las señales de luz y sonido, un aumento notable en la cantidad de errores en la escritura y una disminución de los indicadores de rendimiento, así como una atención y memoria semántica debilitadas, apuntó la terapeuta.
Una investigación llevada a cabo en 2018 por científicos del Instituto Swiss TPH, en Suiza, con más de 700 adolescentes mostró que los campos electromagnéticos de radiofrecuencia de los móviles pueden tener efectos adversos en el rendimiento de la memoria de regiones específicas del cerebro.
Otro factor que podría hacer que sea más difícil recordar cosas es la distracción. Al usar el teléfono, a menudo no estamos enfocados en una única cosa, sino que estamos realizando múltiples tareas e interactuando en distintas aplicaciones. Esta falta de focalización puede hacer que la nueva información obtenida no se almacene en nuestra memoria a largo plazo.
Por su parte, Nabókova subrayó que la medicina basada en la evidencia necesita tiempo para diagnosticar los problemas y encontrar soluciones. Los dispositivos móviles han estado presentes en nuestras vidas desde hace un período relativamente corto, por lo que es difícil encontrar resultados definitivos acerca de sus posibles consecuencias en la salud humana.
Sea como sea, hay maneras para ejercitar la memoria y mantenerla en forma. Algunos ejercicios sugeridos por la terapeuta son contar en voz alta, contar en orden inverso y resolver rompecabezas con números y palabras.
Dormir lo suficiente es otro elemento clave para conservar la salud del cerebro. Se recomienda un mínimo de ocho horas de sueño. Y, si es posible, evitar el uso del móvil dos horas antes de acostarse, sugirió la doctora.
(Fuente: Sputnik)