POR MIGUEL CRUZ TEJADA
NUEVA YORK._ El congresista dominicano Adriano Espaillat denunció que cinco mujeres dominicanas detenidas en la cárcel de la Policía de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el suburbio de Irwin en Ocilla, Georgia fueron esterilizadas en el útero para impedirles tener hijos con las cirugías histerectomía hechas por el ginecólogo Mahendra Amin, añadiendo que se trata de una intolerante violación a los derechos civiles, constitucionales y humanos y un abuso físico contra las reclusas, por lo que pide una exhaustiva investigación para que el Gobierno establezca responsabilidades y el cierre inmediato de esa prisión.
El congresista reveló anoche en una entrevista con este reportero que se reunió con una de las dominicanas, que se resistió a la cirugía, tratándola como un animal, y no pudieron sacarle afectarle el útero
Amin fue uno de nueve médicos acusados por una estafa millonaria al Gobierno federal usando pacientes con seguros de Medicaid y Medicare, que acordaron pagar $520,000 para resolver las acusaciones por reclamaciones de pagos falsas en 2015.
Varias protestas se están llevando a cabo en los alrededores de la cárcel de ICE, exigiendo sea arrestado el ginecólogo y que se clausure la prisión.
Ella, viajó en yola desde Miches en el Este de la República Dominicana y desembarcó en las costas de Aguadilla en Puerto Rico donde fue arrestada por los federales y enviada a la cárcel de Texas, donde lleva tres meses detenida, suplicando que la deporten a su país natal.
Espaillat, no reveló el nombre de esa ni las otras dominicanas operadas por respeto a la privacidad y para preservar sus identidades protegiéndolas.
“Si no hay manera de que ella se quede en Estados Unidos quiere que la deporten”, añadió el congresista.
La interna estuvo durante siete días en la yola en alta mar, junto a 30 hombres y cuatro mujeres.
El congresista explicó que también conversó con seis otras mujeres, seis de las cuales hay dos asiáticas de China.
Cuatro de las seis tuvieron algún contacto con el médico, agregó el legislador federal.
Dijo que las mujeres fueron forzadas a la operación porque no dieron su consentimiento, por lo que está preocupado por el estado de salud de las víctimas y las denuncias son muy graves.
“Ellas no sabían la naturaleza del tratamiento ni dieron su visto bueno para que se lo hicieran”, señaló Espaillat.
“El médico de apellido Amín es quien hace los exámenes sin consentimiento y creemos que es una grave violación a los derechos humanos de esas mujeres, entre las cuales hay cinco dominicanas, africanas, asiáticas, centroamericanas, cubanas, del Medio Oriente, Rumania y otros países, y no pueden ser sometidas a ningún tratamiento sin su consentimiento ni sin saber de qué se trataba”, explicó el congresista.
“De manera que queremos una investigación profunda para que determine exactamente qué es lo que está sucediendo en ese centro que lo queremos cerrado, porque tiene muchas violaciones no solamente con las cirugías a las mujeres, sino también por el manejo de la pandemia COVID-19, ya que no se les dio equipos de protección a las presas y tampoco a las enfermeras que trabajaban ahí”, dijo Espaillat.