WASHINGTON.- Se abren las puertas doradas del hospital y aparece Donald Trump, saliendo del centro médico Walter Reed después de tres días ingresado debido a la COVID-19.
Cuando queda menos de un mes de las elecciones en Estados Unidos, la puesta en escena ha sido estudiada. Pulgar en alto, mientras se oyen lejanos, desde el otro lado de la calle, los gritos de sus seguidores.
Nada sugiere que esté enfermo. El presidente se presenta como el mandatario que, con 74 años y pocos factores a favor, venció al virus, pese a que sus médicos advierten de que aún no está fuera de peligro.
«Estamos en un terreno desconocido», advierte el médico del presidente
«Nos mantenemos cautelosamente optimistas y en guardia porque estamos en un terreno desconocido, con un paciente que ha recibido terapias hace poco.Vamos a ver qué ocurre el fin de semana y si llegamos al lunes con él en el mismo estado o mejor, entonces todos daremos un respiro de alivio»_, explicó el doctor Sean Conley a las puertas del hospital. Recalcando que Trump está recibiendo un tratamiento puntero 24 horas al día.
Igual de estudiada fue la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. Unas imágenes que Trump publicó después en su cuenta de Twitter acompañadas de música heroica de fondo. Ya en el balcón, el presidente se retira la mascarilla y vuelve a saludar.
» Acabo de dejar el centro médico Walter Reed y es realmente algo especial. Los doctores, las enfermeras, los socorristas… ¡He aprendido tanto sobre el coronavirus! Y algo es seguro, no dejes que te domine, no le tengas miedo, vamos a vencerlo», señala el presidente en el vídeo.
En la Casa Blanca, al menos otras 13 personas del entorno de Donald Trump han dado positivo. El mensaje del presidente ha sido cuando menos controvertido en un país donde ya han muerto más de 210.000 personas por debido a la COVID-19.
«Vaya a decirle eso a las 205.000 familias que han perdido a alguien» dijo su rival en la carrera presidencial Joe Biden, que está centrando su campaña en la prevención frente a la COVID-19 y los errores en la gestión de la pandemia de Trump, que le han llevado al hospital.
