POR RAQUEL DEMORIZI
Llamamos Menstruación, Periodo o Regla al sangrado vaginal normal que ocurre como parte del ciclo mensual de la mujer.
Según artículo publicado en la página TeamsHealth dedicado a las adolescentes y revisado por Krishna Wood White, MD MPH señala que mensualmente el organismo se prepara para un embarazo. En caso de que no haya ningún ovulo fecundado, se rompe el recubrimiento y el tejido uterino sale por la vagina en forma de sangre. Cuando una niña menstrua es señal de que se acerca al final de la pubertad.
La pubertad es etapa de la vida donde un niño o niña madura sexualmente. Durante la misma ocurren cambios físicos tales como:
-crecimiento de estatura,
-desarrollo de las mamas,
-ensanchamiento de las caderas,
-crecimiento de pelo en la pubis y axilas,
-cambios en la voz
-y desarrollo del aparato reproductor que es el lugar donde se inician los procesos de ovulación y menstruación.
Desde la primera vez que una joven tiene sus relaciones sexuales está en riesgo de quedar embarazada y es en ese instante que inicia su periodo reproductivo.
La primera menstruación se llama menarquia, suele ocurrir a la edad de 12 años de edad, pero también hay casos, donde ocurre a muy temprana edad como a los 8 o tan tarde como a los 15 o más.
El periodo reproductivo de la mujer concluye con su última menstruación que es cuando sucede la menopausia lo cual puede ser a partir de los 45 años en adelante a pesar de que hay quienes inician su menopausia mucho antes, conozco un par de casos dónde a los 30 les cesó la menstruación, así, de igual modo las hay que aun a los 65 años menstrúan e incluso se han embarazado a esas edades.
Una adolescente embarazada no está emocionalmente preparada para este acontecer, ni física ni socialmente. Estos embarazos a temprana edad pueden causar trastorno a la salud de la madre y del niño, por lo que es importante posponerlo para cuando esté en mejores condiciones físicas, emocionales y sociales.
Como el cuerpo de una adolescente no está listo para traer un bebé o sea no está aún desarrollado puede correr ciertos riesgos de salud, entre esos riesgos tenemos:
-infecciones,
-anemia,
-desnutrición,
-posibilidades de un parto por cesárea,
-bebes de bajo peso, y prematuros,
-complicaciones con la aparición de preeclampsia y eclampsia por lo que es importante controlar la tensión porque si no es controlada a tiempo puede presentar consecuencias muy serias tanto para la madre como para el bebé.
Otra consecuencia es:
-miedo al rechazo social,
-miedo a ser criticada,
-miedo a la responsabilidad,
-miedo al tiempo que tendrá que dedicar y limitar,
-miedo a las obligaciones que trae consigo ser madre,
Tarde se dan cuenta que ser madre no es juego de niños.
El embarazo en los adolescentes aumenta cada vez y es un problema de salud pública que incide en la vida y salud, limita sus oportunidades educativas y laborales afectándoles la autoestima, produciendo depresión.
Cada día vemos embarazos en edades más tempranas lo cual nos hace sentir por momentos que la situación escapa de nuestras manos.
En múltiples casos este tipo de circunstancias pasa a ser un conflicto familiar en el cual algunos padres se niegan a aceptar esta situación, o se dividen porque uno le apoya y el otro no, o le castigan o le obligan a formar un hogar en contra de su voluntad forzándoles a irse de la casa y hay hasta quienes se atreven a optar por un aborto.
La Organización Mundial de la Salud recomienda evitar el embarazo en la adolescencia limitar el matrimonio antes de los 18 años, y apoyar los programas de prevención de embarazos en la adolescencia.
Como medio de prevención la mejor alternativa es una saludable orientación sexual que debe comenzar en el mismo seno familiar, informando sobre los inconvenientes y complicaciones de un embarazo en esa fase de la vida, incluso sobre el riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual, enfatizándoles que las relaciones sexuales pueden esperar, que el placer de un segundo puede causarles grave malestar emocional.
No obstante, si ustedes padres observan que a pesar de todo sus hijos están practicando relaciones sexuales indíqueles donde acudir en busca de información por un método seguro a fin de protegerse y posponer un embarazo, para eso pueden acudir a cualquiera de los centros de Profamilia, siempre habrá uno cerca de usted.
La comunicación es esencial, pero hablando siempre en un plano de confianza donde padre e hijos puedan comunicarse sin temor, con libertad para exponer las dudas posibles sin miedo a castigo ni censuras.
Si ya su hija está embarazada la mejor recomendación es brindarle apoyo incondicional para que no cometa el error de recurrir al aborto que podría costarle la vida.
Hay variedad de libros y folletos que explican y orientan sobre este tema ampliamente.
Lo más importante es ponerla de inmediato en manos de un Ginecólogo Obstetra a fin de que ese embarazo llegue a feliz término y con un producto saludable, lo cual pueden completar con orientación psicológica.
