Puerto Príncipe.- La federación pandillas G-9 y Aliados anunció una tregua para permitir el paso de la ayuda humanitaria hacia las zonas haitianas devastadas por el terremoto, mientras muchas víctimas aún hoy duermen en las calles.
Su líder, el expolicía Jimmy Cherrizier (Barbecue), aseguró que se solidarizará con los damnificados, y participarán del reparto de asistencia a las más de 600 mil familias que precisan ayuda con urgencia, según datos del Gobierno.
«Las Fuerzas Revolucionarias del G9 y sus aliados participarán llevándoles ayuda. Invitamos a todos los compatriotas a solidarizarse con las víctimas tratando de compartir con ellas lo poco que hay», aseveró Barbecue, en un video circulado por redes sociales.
La federación es una de las más poderosas de la capital, y de acuerdo con las organizaciones de derechos humanos, su creación fue sugerida por la Comisión Nacional de Desarme, Desmantelamiento y Reintegración de pandillas, fundada por el presidente asesinado Jovenel Moise.
A pesar del anuncio, la zona más compleja para el envío de insumos, medicamentos, alimentos y agua hacia los departamentos del sur es la comuna de Martissant, donde desde hace dos meses se enfrentan las bandas de Grand Ravine y Ti Bwa.
La violencia en este y otros puntos del país obligó a algunas organizaciones humanitarias a transportar la asistencia en helicópteros.
«A pesar de la negociación de un corredor humanitario, las limitaciones de acceso y la inseguridad siguen siendo un reto importante para los socios humanitarios de todos los sectores», reconoció Naciones Unidas en un informe.
El Gobierno no se pronunció sobre las supuestas negociaciones, aunque indicó a la Policía acompañar todos los convoyes hacia los lugares afectados.
Por el terremoto del 14 de agosto murieron al menos dos mil 207 personas, y 12 mil 268 sufrieron lesiones, mientras todavía 344 se encuentran desaparecidas.