Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ El padre de la pastora Elisa Muñoz Marte y Joel Eusebio Díaz Ferrer, Marino Núñez pidió ayer domingo una indemnización al Gobierno por el asesinato de su hija cuando el vehículo que ella y su esposo abordaban camino a Santo Domingo fue emboscado por policías de Villa Altagracia quienes dispararon más de 70 balazos por una supuesta confusión o caso de identidad equivocada, hecho que consternó a todo el país y a la comunidad internacional el 30 de marzo 2021.
“No creo en la justicia de la República Dominicana”, dijo el progenitor de la pastora que además tiene otros 6 hijos, 5 hembras y 1 varón en una entrevista por teléfono con este reportero desde su residencia en Allentown, Pensilvania.
La pastora asesinada era su hija mayor.
El señor Muñoz agregó que él, su esposa y toda la familia siguen devastados por los asesinatos brutales de su hija y el esposo, rechazando las versiones que se han dispersado sobre el móvil del ataque que incluso el uso de armas largas de alto poder como ametralladoras y rifles M-16.
“Mis informaciones sostienen que se trató de que el coronel estaba tratando de dar un tumbe para quedarse con las drogas en la creencia de que los criminales iban en el carro emboscado, pero resulta que los vehículos eran de marcas diferentes: el de mi yerno era un KIA blanco sin el bumper atrás y no un Hyundai que era el que la policía supuestamente buscaba con cinco delincuentes a bordo que todavía no aparece”, añadió.
“Ellos se confundieron de carro porque realmente a quienes buscaban era a otras personas cargados de drogas, dinero o qué se yo, pero los policías violaron todos los protocolos, porque aunque hubieran sido los criminales no estaban supuestos a matarlos”, precisó.
“Los cercaron y los emboscaron lo que significa que la operación se hizo a lo que el coronel creía que iba en el carro para matar a todo el que iba, cogerse las drogas y hacer ver que fue un intercambio de disparos como siempre él hace”, expresó Muñoz.
Por los homicidios son acusados el sargento Domingo Perdomo Reyes, los cabos Norquis Rodríguez Jiménez y Ángel de los Santos, y los rasos Antonio Castro Pérez y Juan Samuel Ogando Solís, quienes formaban parte de la Policía Preventiva.
Muñoz asegura que además se le ha informado que hubo más policías que participaron en la emboscada fatal, pero que hasta ahora, esos no aparecen y exigió al Ministerio Público y a la fiscal de Villa Altagracia, buscarlos para que sean procesados al igual que los demás.
El padre de la pastora explicó que se puso en contacto con este redactor después de ver que el manejo judicial del caso y las investigaciones están a medias porque hay muchos cabos sueltos que la justicia no ha atado.
Los imputados que fueron dirigidos por el coronel César Mariñez Lora, ex director de la Dirección General de Control de Drogas (DNCD) en Villa Altagracia y quien dirigió el operativo de la Policía Preventiva en el que la pareja fue asesinada y los acompañantes heridos.
El coronel fue arrestado el 20 de abril 2021 por orden del Ministerio Público y los policías se mantienen con 1 año de coerción, medida que les fue ratificada en una audiencia este 20 de agosto.
El papá de la pastora también desmintió que ella tuviera problemas cuando residía en Italia y por lo que decidió regresar a la República Dominicana fue para continuar su ministerio cristiano y las obras de bien social que hacía por los más pobres.
“Se han dicho muchas cosas, pero todo esas versiones son mentiras, inventos”, aseguró Muñoz.
“El Gobierno dominicano no se ha hecho presente con la familia que por ley tiene que darles una indemnización a los afectados porque le quitaron la vida a mi hija”, dijo.
“Soy responsable de lo que estoy diciendo”, sostuvo informando que trató de enviarle una carta a la Policía Nacional que no llegó a su destino.
Explicó que tuvo que enredarse económicamente para poder cubrir los gastos funerarios de su hija y los viajes a República Dominicana y que ninguna entidad del Gobierno ha aparecido en su auxilio.
“No me siento nada bien, pero estoy tratando de sacar fuerzas para mantenerme en pie y seguir luchando por la justicia y tengo que ser consecuente con mi familia porque soy el hombre de la casa”, señaló Muñoz.
Añadió que toda la familia tuvo que viajar a la República Dominicana.
“El coronel pidió una licencia paras que le bajaran la medida de coerción y se hizo sin notificarnos a nosotros”, se quejó denunciando que están tratando de usar artimañas “porque ese tipo (el coronel Mariñez) es un delincuente, atracador, ladrón y criminal, tienen que encubrir a una parte de los policías porque no les conviene”, reveló el padre.
Acusó a Mariñez de dar la orden y estaba en la escena de los asesinatos sin darles chance a nada. “El carro lo pararon y comenzaron a disparar sin mediar palabras”.
Criticó la clasificación del caso como “complejo” porque hay pruebas suficientes. “Le están buscando una quinta al gato y tienen que estar presos porque fue crimen que lo vio el mundo entero”, expresó.
Informó que contrató los servicios del abogado y comunicador José Martínez Hoepelman para que represente a la familia en la parte civil.
Dijo que el coronel estuvo preso porque cuando era jefe de la DNCD, se desaparecían muchas drogas.
“Lo que encontraron en el carro fueron biblias pero una policía pretendió decir que el esposo estaba armado”, añadió.
Dijo que el cuerpo de su hija fue tratado como un saco de basura en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) donde se le hizo la autopsia y el cadáver fue tirado desnudo en una pileta.
“Una policía dijo en el cuartel que el esposo de mi hija estaba armado”, indicó Muñoz.
