Por Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ La policía de El Bronx identificó ayer miércoles a la dominicana de 79 años de edad hallada muerta el lunes en su apartamento de El Bronx, como Francisca Trinidad, quien fue asesinada a golpes por su hijo Melvin Arias de 57 en medio de una discusión cuyos motivos se desconocen.
Arias, un ex convicto criminal que estuvo en la cárcel durante 5 años y fue liberado en 1995 fue detenido en la escena con una navaja en el bolsillo y arañazos en la cara.
Arias, fue acusado en la Corte Criminal de El Bronx donde los fiscales calificaron el homicidio como un crimen atroz, especialmente tratándose de su madre.
Los fiscales dijeron que la señora Trinidad fue asesinada el lunes por la noche en el apartamento de la familia en el edificio 760 de la avenida Grand Concourse cerca de la calle 156 Este.
Los policías que respondieron a una llamada al 911 a las 11:23 de la noche hecha por una vecina que dijo haber escuchado una fuerte discusión encontraron a Trinidad muerta, añade el parte policial.
Arias fue acusado el martes por la noche de asesinato, homicidio involuntario, agresión y posesión criminal de un arma.
“El acusado fue encontrado en el lugar con un cuchillo y rasguños recientes en la cara que aún sangraban”, dijo el fiscal auxiliar Michael Pabón durante la lectura de cargos en la corte. La víctima presentaba heridas defensivas en manos y rostro, añadió el fiscal.
La fiscalía dijo que Arias golpeó a su madre con ambas manos y un objeto punzante, provocando que ella cayera y perdiera el conocimiento.
Fue encontrada muerta con la cara magullada y cortes sangrantes en las manos.
El fiscal adjunto dijo que el video de vigilancia muestra a Arias sacando una bolsa de basura negra. “La bolsa contenía cinta adhesiva, sangre y cabello”, añadió.
Arias tiene cinco condenas previas y tres faltas de comparecencia ante el tribunal. Cumplió dos años y medio de prisión por posesión criminal de un arma y fue puesto en libertad en 1995.
Se ordenó la detención del ex convicto sin derecho a fianza durante su lectura de cargos. Si es declarado culpable, enfrenta una pena máxima de 25 años a cadena perpetua.
El edificio de apartamentos de la víctima fue el lugar de un espantoso asesinato hace más de cinco años que involucró a una pandilla local y a una madre dominicana inocente.
Wendy Martínez, de 45 años, fue asesinada en diciembre de 2018 cuando un hombre armado tocó el timbre de su puerta y le disparó por la mirilla mientras ella miraba para ver quién estaba allí.
La policía sospechaba que el tirador tenía como objetivo a su hijo Brian Solano, quien estaba siendo juzgado por asesinato. Solano había sido acusado cuatro años antes de matar a tiros a un hermano de un miembro de alto rango de la pandilla Trinitarios.
Leyda Martínez, de 48 años, dijo el martes que la familia abandonó el edificio después de la muerte de su hermana.
“Después de eso, todos nos mudamos de ese lugar”, dijo. “Tal vez haya algo malo con ese edificio. Lo siento por Trinidad Espero que descubran lo que pasó”.
El cadáver de trinidad también tenía un hematoma en el ojo derecho y cortes en la mano, fue declarada muerta en la escena, confirmaron los investigadores.