SANTO DOMINGO ESTE, RD.- En el encuentro de hoy, sábado, los niños y niñas de la Fundación Dominicana por la Vida, Inc. -FundoVida-, acompañados de varios de sus familiares, fueron orientados en torno a la importancia de frecuentemente leer cuentos y escuchar canciones infantiles, como parte del proceso de formación educativa y crecimiento humano.
Luego de disfrutar de la exposición de varios cuentos clásicos para los infantes, también se insistió en que inviten a sus progenitores, si es posible cada noche, a leer en familia, antes de la hora de dormir, algunas narraciones estimulantes y edificantes para elevar el nivel cultural e intelectual de sus hijos.
Como ejemplos de cuentos introductorios que podrían atraer la atención de los infantes se enunciaron los casos de Los Tres Cerditos, Blanca Nieves y los Siete Enanitos, La Gallinita Roja, Pinocho y El Principito, entre otros.
En el transcurso de la amena y concurrida actividad algunas de esa publicaciones fueron donadas a los asistentes gracias a la colaboración de una gentil señora de nacionalidad venezolana, quien pidió no publicar su nombre.
De igual modo, los niños y niñas de FundoVida recibieron, como estimulo, la entrega de vasos decorados, floreros y peluches.
En el caso de las personas adultas, los directivos de la organización comunitaria procedieron a entregarle, tal como fuera del deseo de la referida dama, algunas piezas de vestir.
Asimismo, los asistentes a la reunión sabatina de FundoVida disfrutaron de un exquisito café con leche, acompañado de galletitas y golosinas.
A mitad del encuentro, también fue anunciada la continuidad del Curso de Repostería, bajo la coordinación de Elaisa González, en donde los niños y niñas de FundoVida tendrán la oportunidad de aprender sobre esa importante actividad productiva, los dias martes, jueves y sábados.
La Fundación Dominicana por la Vida, Inc. es una organización comunitaria sin fines de lucro que desde hace más de dos décadas viene desarrollando planes, proyectos y programas tendentes aportar al desarrollo material y espiritual de los infantes residentes en la populosa barriada de Maquiteria, municipio Santo Domingo Este, zonas aledañas y otros puntos de la geografía nacional.
Con su modesto trabajo comunitario ha puesto de manifiesto, tal como expresa su eslogan de identificación que, en República Dominicana, a pesar de los pesares, se puede…!!
