WASHINGTON.- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el ataque a oficinas en República Dominicana de una organización dedicada a la defensa de los derechos de migrantes haitianos.
Instó al Estado dominicano a garantizar la seguridad de quienes integran el Movimiento Socio-Cultural de Trabajo Humanitario y Ambiental (MOSCTHA) y de quienes acuden a su sede, para que puedan ejercer sus actividades libres de cualquier forma de intimidación.
El 2 de octubre el Consejo de Seguridad y Defensa Nacional de República Dominicana anunció la implementación de un plan de ejecución inmediata para expulsar a más de 10.000 personas en situación migratoria irregular por semana.
Frente a esa decisión, organizaciones de la sociedad civil han denunciado múltiples violaciones a los derechos humanos de las personas migrantes y apátridas, tales como expulsiones masivas, deportación de niñas y niños no acompañados, confiscación de documentos de identidad y hacinamiento en los centros de detención migratoria.
En este contexto, la Comisión recibió información de la MOSCTHA de que representantes de grupos que respaldarían la nueva política de expulsión de migrantes habrían rodeado sus oficinas gritando consignas estigmatizantes en contra de las personas haitianas. Agrega que, pese a que personal de la organización solicitó la protección de la Policía Nacional, esta no se habría brindado.
Reiteró la importancia que tiene la labor de las personas defensoras para toda sociedad democrática y el Estado de derecho. A la vez, enfatiza que la violación del domicilio y otras injerencias arbitrarias o abusivas en las instalaciones de organizaciones de derechos humanos o en el domicilio de sus integrantes es una forma de menoscabo de las acciones que desempeñan en defensa de los derechos humanos.