Contra El Olvido: Manuel Tejada Florentino

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Por Dagoberto Tejeda Ortiz

Salcedo es de los pueblos mágicos que no se olvidan, se llevan siempre en el corazón. Casas con todo el año llenas de flores, amaneceres que traen amores siempre presentes, seres humanos desonrisas solidarias, miradas de esperanzas ysueños de libertad.

En ese ambiente, el 17 de diciembre de 1907, vio por vez primera las estrellas y los luceros Manuel Tejada Florentino, donde la vida era un privilegio y un acontecimiento. Acumuló las vivencias de la primera Intervención Norteamérica a nuestra patria y de la dictadura trujillista.  No nació en cuna de oro, tenía padres que desafiaban y sobrevivían en la vida.

Por eso, para ayudar a la familia se desempeñó como limpiabotas, cargador de maletas en el ferrocarril, fue músico, llegando a dirigir la Banda del pueblo y después que se hizo bachiller en Filosofía y Ciencias Naturales, instaló un taller de ebanistería, donde era un maestro y un artista, para prepararse económicamente para la universidad.

Era un músico  que además de arreglista, tocaba a la perfección la tambora, la guitarra y el bandoneón.  Con la guitarra y el bandoneón, era el más solicitado para dar serenatas, el cual hacía con gusto ya que era un bohemio y un enamorado del amor.

AUTOR: Dagoberto Tejeda Ortiz

Era un ser agradable, además de artista, un destacado bailador, adicto a los sancochos, agua de coco, jugo de limóny dulces criollos;participante de las fiestas patronales, fue Orfelo y Masón, Gran Maestro de la Logia, además, era miembro del Club Rotario y admirador de los Boy Scouts.

Pero Manuel era un soñador y se fue a la ciudad de Santo Domingo a estudiar medicina en la UASD, en la cual se graduó con honores.  Decidió seguir adelante y en el 1951, logró irse a realizar una especialidad a México y se graduó de cardiólogo en el Instituto de Cardiología de México.  A su regreso, se convirtió en un profesional de prestigio, a tal punto que fuecardiólogo de Daña Julia Molina, la madre del dictador y de su hermano José Arismendi, conocido como Petan.

México, cambió su mentalidad y su vida.  Fue una escuela, le enseñó todo la negación de la dictadura trujillista, vivió los caminos de la democratización y se tonificó con los olores y sabores de la libertad.Profundizó su amistad con Minerva, Patria y María Teresa Mirabal,con la odontóloga Fe Violeta Ortega (Tía Fe), Tomasina Cabral (Sina), el Dr. Manuel Ortega y el joven Rafael –Fafa- Tavera.

Por estas razones,no fue sorpresa que Manuel fuera uno de los fundadores y militantes del Movimiento Revolucionario del 14 de Junio, organización que traumatizó a la dictadura e impacto a la sociedad dominicana por la procedencia social-económica-política e identificación de sus miembros, por su osadía política, rompiendo todos los cánones de la imaginación, indignandoal dictador y a los aparatos represivos del régimen.

¿Cómo era posible que este doctor, distinguido por la dictadura, fuera miembro de un grupo de enemigos del Jefe, que decidieron eliminar su gobierno? ¿Cómo es posible que personas que Trujillo le había dado toda su confianza y amistad, que estaban a su lado, como Miguel Ángel Báez Díaz,decidieran conspirar para matarlo? ¿Es imposible comprender que algunos familiares del Jefe, como Yuyo de Alexandre, fueran parte de esta conspiración?  La reacción de Trujillo fue rabiosa, rencorosa y vengativa. Para él, ellos eran unos desleales, ingratos y malditos.  ¡La saña fue irracional y la represión fue brutal.

Decenas de jóvenes fueron arrancados de sus hogares, de sus trabajos, por los esbirros trujillistas camuflados en el Servicio Nacional de Inteligencia (SIN), transportados en lúgubres vehículos conocidos como “Cepillos” para las cárceles y cámaras de torturas de un régimen herido, en plena decadencia, que como bestia herida irradiaba venganza, terror, tortura, muerte y sangre.

Como de costumbre, Manuel se levantó temprano, se desayunó y a las nueve y media salió con destino al Hospital Salvador B. Gautier, donde era Jefe del Departamento de Cardiología.  Comenzó a ver sus pacientes, cuando fue interrumpido por miembros del SIN.  En un primer momento pensó que era una rutina, porque conoció en el grupo a Fincho Palma,el cual era su ahijado de Tenares.¡Se equivocó¡

Estando en una fila de las ergástulas del régimen, la 40, presenció cuando un compañero de celda, después de aguantar toda clase de torturas, al sentarlo en la silla eléctrica y darle descargas, comenzó a dar síntomas de muerte.  El Dr. Manuel Tejada Florentino, grito: “Yo soy médico, cardiólogo, por favor déjemelo atenderlo”.  No le hicieron caso, los verdugos aumentaron las descargas y el compañero murió.  Los torturadores, asesinos profesionales, hernias con ropa, soltaron carcajadas y enburla llamaban a Manuel para que lo atendiera, cuando ya estaba muerto.

Manuel era hipersensible a la corriente eléctrica.  El día que lo sentaron en la silla, se lo advirtió a sus asesinos.  No les importó, con más saña le propiciaron continuas e intensas descargas eléctricas.  No las aguantó y el héroeallí murió, con la frente en alto, ante la indiferencia de traigan otro, por parte de sus torturadores.  Su cadáver fue ocultado. Nunca ha aparecido. No lo busquen más.  Él está con las Mirabal, con Manolo, con Caamaño, con Amaury y todos los hijos de la patria que ofrendaron su vida por la libertad de este pueblo.

Manuel al morir nació, vive en el corazón del pueblo, en las páginas de la historia y en la dignidad de la Patria.  Una escuela y el dispensario médico de la UASD, llevan su nombre.   En la lucha contra el olvido se acaba de inaugurar un museo personal en su pueblo natal.  Yo tengo un pequeño armario donde guardaba instrumentos médicos. ¡Ahora estará donde tiene que estar! ¡Manuel, mártir y héroe nacional!