SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- La Sociedad Dominicana de Nefrología (Sodonef) externó preocupación por el aumento de los enfermos renales crónicos en el país y sugirió implementar programas de prevención y detección de la enfermedad, que obliga al Estado a invertir cientos de millones de pesos en el tratamiento a pacientes pobres.
El presidente de Sodonef, doctor Guillermo Álvarez Estévez, aseguró que la enfermedad renal crónica ha ido en aumento en el mundo, incluyendo la República Dominicana, crecimiento que se ha tornado en un problema de salud pública, debido a los altos recursos económicos que deben dedicarse para tratar a quienes padecen la enfermedad.
Dijo que Sodonef tiene que jugar un papel activo en el sistema de salud del país y están dispuestos a mantener una vía de asesoramiento permanente al Ministerio de Salud Pública, con el objetivo de formular políticas que beneficien al paciente renal y al pueblo dominicano.
Álvarez Estévez propuso desarrollar un plan nacional de detección y prevención de enfermedades renales en la República Dominicana para enfrentar la epidemia.
Considera que en el plan debe participar el Departamento de Enfermedades Crónicas no Transmisibles del Ministerio de Salud Pública, y que este se iniciaría a través de la vigilancia de laboratorios para que cuando una prueba de función renal como la creatinina resulte elevada o aparezcan proteínas presentes en la orina, inmediatamente se reporte al programa de detección y prevención de enfermedades renales y se avise al paciente afectado que debe acudir a un nefrólogo.
Dijo que el plan obliga a crear departamentos para la promoción de la salud renal y el seguimiento y tratamiento de las enfermedades renales crónicas.
Propuso para los pacientes que se encuentran en diálisis realizar el registro nacional de diálisis y trasplante, el cual permitirá conocer la dimensión de las enfermedades renales en el país, su morbi-mortalidad y las regiones que requieren mayor atención epidemiológica.
Indicó que en el campo del trasplante renal su aspiración es poder obtener que en los hospitales del sector público se realicen de manera rutinaria esas cirugías, aumentar el número de trasplantes en la República Dominicana, apoyar las campañas de donación de órganos con fines de trasplantes e incentivar el suministro de medicamentos inmunosupresores a los pacientes trasplantados.