CARACAS.- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmó ayer que hay funcionarios públicos que están detenidos y siendo investigados por la muerte de tres jóvenes el pasado 12 de febrero al término de una marcha pacífica de estudiantes y opositores por Caracas.
«Están detenidos parte de los involucrados que usaron armas, los que son funcionarios públicos los entregué inmediatamente, apenas vi las fotos los mandé a detener y apenas la Fiscalía me los pidió los entregué con armas y todo», dijo Maduro en conferencia de prensa.
«Si alguno de ellos parece involucrado en alguna persona herida de bala o en alguno de los fallecidos que pague con cárcel, no protejo a nadie que dispare a nadie en este país en manifestaciones», agregó.
El pasado 12 de febrero miles de personas se concentraron en una marcha de estudiantes y de opositores que se manifestaron de forma pacífica contra el Gobierno, sin embargo posteriormente grupos de jóvenes se dirigieron a la Fiscalía y entraron por calles laterales.
Los últimos fueron objeto de tiroteos provocando la muerte de dos de ellos. Un tercero que había auxiliado a uno de los muertos en esa zona falleció por disparos en Chacao, en el otro extremo de la ciudad.
Maduro señaló que también hay «gente de carácter civil que estaban allí y que ha originado toda una campaña contra los colectivos venezolanos».
«Ya están buscando a algunos que está comprobado que dispararon, presos tienen que ir, lo primero no tenían que estar ahí ni de broma y segundo armados menos y tercero disparando menos», añadió.
Maduro advirtió también de «posibles infiltrados» recordando que ese día había funcionarios del Servicio de Inteligencia (Sebin) que incumplieron la orden directa de que los miembros de ese cuerpo tenían que acuartelarse.
«Estoy investigando todo eso y si llegaran a aparecer elementos se lo diría a mi patria y a ustedes de que hay conspiradores dentro del Gobierno o ha sido comprado algún funcionario, se lo diría al país con cuatro pares de voluntades que tengo y diría los nombres de los complotados tengan la seguridad», declaró.
Explicó que con la misma arma se mataron a Basil Alejandro Da Costa, un joven estudiante opositor, y a Juan Carlos Montoya, miembro de un colectivo chavista.
«¿Qué cosa no? uno de aquí y uno de allá», dijo.
Tras esos incidentes, las protestas estudiantiles y opositoras se han multiplicado en todo el país, donde se han producido enfrentamientos y actos violentos que han dejado ocho muertos y más de 130 heridos.
