Por Miguel Cruz Tejada
MOCA._ Un destacado dirigente del Partido Revolucionario Mayoritario (PRM), empleado del ayuntamiento y activista comunitario identificado como José Lucía Fernández Ureña de 70 años de edad, fue asesinado ayer jueves en la noche por un grupo de hombres a los que se enfrentó defendiendo un hijo, al que los implicados le reclamaban el pago de una deuda de $600 pesos. Murió en el hospital estatal doctor Toribio Bencosme.
Fernández, se desempeñaba al momento del crimen como presidente de la Junta de Vecinos del Barrio Viejo Puerto Rico y había presidido en tres oportunidades la directiva del club de esa populosa barriada.
Los investigadores dijeron que hasta el momento hay dos sospechosos arrestados en relación al asesinato del dirigente perredeísta mocano.
El hecho, ocurrió ayer jueves alrededor de las 11:00 de la noche frente al club Rodrigo Cervantes en la calle del mismo nombre de ese centro en el barrio Viejo Puerto Rico, situado en la parte baja del municipio de Moca.
La policía informó que el dirigente del PRM, fue asesinado a tubasos y que uno de sus agresores, le clavó una “pata de cabra” en el corazón.
Los parientes de Fernández, alegan empero, que fueron cuatro los sujetos que mataron al dirigente perredeísta.
Fernández, había sido también el chofer del entonces síndico de Moca doctor Rubén Lulo Gitte en el período 1994-98. También era miembro y activista de la Comisión de Derechos Humanos en la provincia Espaillat.
Versiones recogidas en el lugar del asesinato, sostienen que tanto la víctima como los matadores se conocían entre sí y vivían en el mismo sector.
El parte policial de la 29 compañía de la Policía Nacional en Moca, explica que falleció de múltiples traumas contusos en el tórax, el cuello y una herida contusa en el hombro derecho.
Los sospechosos detenidos para la investigación del asesinato de Fernández son Juan Rafael Suárez Díaz (Mongo), de 40 años de edad, Vladimir Antonio Sánchez y Juan Manuel Suárez, este último prófugo.
Agentes de la policía, comandados por el Segundo Teniente Odalis Félix Reyes y acompañados por el fiscal adjunto Saturnino Muñoz, quienes hicieron un descenso en la escena del crimen.
El cadáver de Fernández fue levantado después de la medianoche y enviado a Patología Forense en Santiago de los Caballeros, para la autopsia oficial correspondiente.