SANTO DOMINGO DE GUZMAN, RD.- El presidente de la Junta Central Electoral, doctor Roberto Rosario Márquez, consideró este martes que desde el Poder Ejecutivo hay un interés por controlar el organismo de elecciones y tienen una campaña para desmeritar la institución y a su presidente.
Advirtió que es una aventura que afecta la democracia. “Los propósitos que se ven no son buenos, que no sé cuáles son los fines, pero en un proceso electoral como el que viene no creo lo más adecuado que eso esté ocurriendo”, expresó Rosario Márquez cuando se le preguntó sobre el escarceo con la Contraloría General de la República y la Dirección de Compras y Contrataciones del Estado.
El presidente de la JCE expresó preocupación porque el contralor general, Rafael Germosén Andújar, dijo que actúa por mandato.
“Insisto que ese señor en El Nacional afirmó que actúa por mandato, que él despacha con el presidente Danilo Medina, que no depende ni de Hacienda ni de Gustavo Montalvo”, expresó .
Afirmó que además del acoso de Contraloría y la Dirección de Compras y Contrataciones, recibió un oficio el 30 de mayo pasado del subdirector de fiscalización de Impuestos Internos notificando a la JCE “que en uso de su facultad de nuestra auditoría abarcará la revisión integral de los libros de registros contables, recibo de ingresos y pago financieros, nómina de pagos, pagos a contratistas y otros procedimientos”.
Más transparente
El doctor Rosario Márquez aseguró que no es verdad que se niega a cumplir la Ley de Compra y Contrataciones y que la JCE tiene un método mucho más transparente que el que maneja esa institución.
Dijo que la primera comisión de veeduría que se formó la hizo la Junta, los que observan y escrutan las licitaciones a que son sometidas los procesos de compras y contrataciones
Manifestó que el organismo tiene una comisión de licitaciones, que preside junto a cuatro personas más Luis Ramón Cordero, persona de prestigio y conocida. Explicó que el organismo electoral no ha hecho una licitación sin previo haberla puesto en el portal de la JCE, en un periódico, “porque no hacemos nada escondido”.
Dijo que a lo que se opone la JCE es que la Dirección de Compras y Contrataciones sea un órgano de apelación de lo que decida la Junta, que sólo puede ser cuando se trata de compras por el Tribunal Superior Administrativo, o por la Suprema Corte de Justicia o si hay una violación por el Tribunal Constitucional.
“Si fuera así en un proceso electoral, si tuviéramos una persona que quisiera incidir en la organización del proceso, pudiera hacerlo a través de la Dirección de Compras, hasta pudiera tomar medidas para obstruir el proceso, como en las compras de equipos, incluso marchitar y enturbiar el proceso electoral, y hasta tomar medidas que pudieran poner en peligro el proceso electoral” .
Agregó que “cuando viene a ver, muchos de los que quieren controlar la JCE, se postulan a candidatos a senador, diputados ¿y tú te imaginas a uno de ellos que también controle la Junta y los procesos administrativos del organismo”.