Por Jhonny Trinidad
NUEVA YORK.- Dos hermanas dominicanas residentes en esta ciudad denunciaron la ocupación ilegal de una residencia suya en Santo Domingo por una persona a quien calificaron de «maquinadora».Mayra y Elizabeth Suero revelaron que alquilaron su casa en el año 2005 a Odalis Robles Rodríguez para que residiera con su familia, pero en lugar de ello, la mujer abrió un bar que les ha provocado serios problemas con sus vecinos, debido al ruido, peleas y otros desórdenes que se generan en el lugar.
La casa está en la calle José Gabriel García, número 157, en la Zona Colonial, un área famosa por su tranquilidad, hasta que a la inquilina se le ocurrió la ídea de abrir el «Café de Toi», un lugar donde, según las hermanas Suero, «pasa de todo».
Mayra, quien es odontóloga y labora como tal en un hospital de Nueva York, reveló que la inquilina no les paga renta desde hace cuatro años.
«No entiendo porqué en República Dominicana da tanta brega desalojar a alguien que ocupa una propiedad de forma ilegal, ni cómo personas se apoderan de un inmueble que no les pertenece, sin que las autoridades hagan nada», afirmó.
Agregó que «mis hermanos y yo solo queremos recuperar nuestra casa, que heredamos de nuestra querida difunta madre, Olga Suero, y de mi abuela Evangelina Suero».
«En ese sentido, apelamos a las autoridades y al presidente Danilo Medina, quien ha dicho que el sistema de justicia está cambiando en la República Dominicana y que el acceso a la justicia será garantizado para todos. Esta es una buena oportunidad para demostrarle al mundo que esas palabras no quedarán en el aire», manifestó.
Aclaró que «no queremos perjudicar a nadie, solo recuperar lo que legalmente nos pertenece, y ayudar a que la comunidad donde está nuestra casa recupere la paz de la que gozaba antes de que esa señora (Odalis) montara el prostíbulo conocido como «Cafe de Toi» sin el consentimiento de mi familia, que somos los verdaderos dueños de ese lugar».
Recordó que su familia y otras que residen en el entorno donde opera el referido bar han realizado ingentes esfuerzos para cerrar ese negocio y recuperar la tranquilidad, «pero parece que nuestro clamor no es prioridad para la Alcaldía de Santo Domingo, Patrimonio Cultural, el Ministerio de Interior y Policía, Oficina de Atención al Ciudadano y la Defensoría del Pueblo, a donde hemos acudido en reiteradas ocasiones».
Agregó que «para nosotros también es importante que nuestros vecinos estén conscientes de que hemos realizado toda clase de diligencias para cerrar ese bar».
Elizabeth, de su lado, dijo que «los vecinos nos han llamado la atención por el desorden y ruido estridente y las peleas que cada noche se generan en el bar».
«Mi familia no tiene nada que ver con ese bar y las actividades de Odalis Robles Rodríguez. Nos desligamos de todas sus acciones y los incidentes que ocurren en ese negocio», subrayó.
Informó, asimismo, que «estamos en proceso de desalojar a esa señora por violación de contrato y por haber utilizado la casa para montar un prostíbulo, cuando se la alquilamos para que residiera con su familia, no para que pusiera una barra».
«Los vecinos, inclusive, nos han informado que el expresidente Leonel Fernández decretó que la calle José Gabriel García es una zona residencial, por lo que no entendemos cómo esa señora obtuvo permisos para instalar su negocio allí», señaló.
Aseguró que «somos una familia unida y honrada, que gestiona y alquila propiedades desde hace más de 40 años. Esta inquilina, Odalis, quien inicialmente estaba pagando alquiler, desde hace cuatro años decidió vivir en nuestra residencia sin pagar y adueñarse de una propiedad que no le pertenece, para lo cual se ha valido de tráfico de influencias y falsos testimonios».