Por CHOLO BRENES
Estoy cansado de decir decenas de veces que yo no fabrico talentos, yo los descubro, los pulo y los presento como tales. En múltiples oportunidades la gente viene donde mí como si yo fuera un médico que cura males como la desafinación, el de la imagen, y otros que a veces no los dejan desarrollarse. Yo no soy un curandero, uno de los brujos de Ecuador. Vienen aquí con un ropaje de humildad y en el transcurso de los días se les sale el mal olor que desprende la arrogancia e inundan el lugar por donde quiera que pasen.
Hace unos años se apareció en mi oficina un joven de azua, su nombre: José Luis. Lo escuche, vi sus condiciones y lo lleve donde la profesora de canto Marianela, mi amiga. Me dijo que tenía muchas condiciones, que lo ayudara y así lo hice, le pagué año y medio de escuela de canto, más el transporte ida y vuelta Azua/Santo Domingo todas las semanas. El mayor pago para mí ha sido que todos los meses me llama y me habla de sus avances. En estos días me llamó para invitarme a la presentación Wilfrido-Villalona y hoy leo la opinión de Fausto Polanco en donde resalta la participación de José Luis. Qué bueno que éste es uno de los que supe sembrar su talento. Tus padres podrán tener billete, pero el talento no se compra con el oro. Con éste se nace y caro que vale el tratar de obtenerlo. A los padres que creen que el dinero lo hace todo se equivocaron, ayuda cuando se tiene talento.
Pero la condición básica es tenerlo. Muchos vienen con el maletín lleno de dinero, pero vacío de condiciones innatas que la más de las veces están llenos de vicios. Los que tuvieron la oportunidad de ver el sábado pasado la presentación de Kel Hernandez en Cinema Café, a casa llena, se darán cuenta de cómo él y sus cinco músicos expusieron un derroche de talento cargado de humildad. Porque el que siembra sabe recoger, decosechar. Y éste es el caso de esta generación que sin vicios vuelven loco a cualquiera.
Lord Byron (poeta inglés) decía en sus citas: “El pasado es el mejor profeta del futuro”. Estos sembraron en el pasado.