POR RAFAEL SANTOS
Acabo de leer un interesante libro, que lleva por título: “Convierte la Crítica Destructiva en un Motivo para Superarte”, el cual en honor a la verdad no recuerdo donde lo compré o si algunos de mis amigos me lo regaló. Lo cierto es que el mismo trae entre sus páginas una enseñanza de primer orden para entender aquellos que por razones diversas trabajan para nuestra destrucción a través de la crítica.
Sin embargo, es justo decir, que este libro, del escritor Español Mariano González, y de 192 páginas, es un viaje que desde las primeras palabras nos obliga a transitar por ese majestuoso océano de conocimientos, en donde los que nos atrevemos a cruzarlo a través del nado de la lectura nos vemos imbuidos a continuar adelante, pues, en cada capítulo que leemos, el mismo se convierte en un estímulo más que nos permite razonar con inteligencia sobre el tema en cuestión
¡……Señores, no es fácil, amar a quienes nos hacen mal y nos critican solo por el hecho de que usted o yo hayamos roto el molde que la sociedad nos impone!. Es una difícil situación cuando decidimos colocar sobre nuestro rencor una barrera a nuestros negativos sentimientos, para poder cumplir con ese mandato bíblico señalado en Mateo 5:44: “Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen”
Convertir la crítica destructiva en un motivo de superación tal y como lo dice el título del libro que en el presente artículo comento, no es una fácil labor, pero si actuamos con inteligencia y nos decidimos a dar ese primer paso, no solo logramos sobreponernos a esos infundios que a diario nos asaltan de aquellos precisamente que en muchas ocasiones no lo esperábamos, sino además, que hasta logramos que en nuestro interior se concilie un acto de amistad y de comunión entre nuestro espíritu y nuestra conciencia, los cuales cuando se producen este tipo de malsanos comentarios en nuestra contra, de inmediato surgen una serie de conflictos, en donde para mal de nuestro estado emocional casi siempre termina ganando el aspecto negativo y el no perdón hacia quienes nos tratan de destruir a través de las críticas.
Recordemos, que cuando nos critican y tratan de hacer de ella un arma para nuestra destrucción, es porque sencillamente estamos siendo objeto de observación por aquellos que protagonizan esos comentarios, determinándose en muchos de los casos, que nuestro accionar reviste de una importancia capital para aquellos que nos tienen presente.
Revertir las críticas en un motivo para superación, es una tarea difícil, como apuntáramos en líneas anteriores, pero al tratar de hacerlo, estamos actuando con inteligencia emocional al no darle rienda suelta para contestar muchas de las cosas que nos martillan nuestros sentimientos y hasta nos acorralan para llevarnos al terreno en donde quien utiliza ese método satisfacer su ego, nos quiere llevar, y desgraciadamente esa persona sobrecargada de esos negativos sentimientos, en la mayoría de los casos sale ganando ya que ese tipo de gente, convierte su escenario social, en su modu vivendi para destruir a los demás.
Las criticas destructivas no son más que resabios que provienen de aquellos que: o tratan de ser como el sujeto criticado, o en su defecto, son personas amargadas, sin personalidad definida, con resabios internos que lejos de buscarle una salida a través de la reflexión hacia lo positivo, se hunden más y más en el proceloso mar de las intrigas……Una persona que critica en términos negativo, carece de iniciativas para dar frutos positivos a la sociedad, pues, su capacidad no le da más que para albergar aquellos sentimientos cuya gestación siempre anida el odio.
Dice el autor del presente libro que de manera breve analizamos, cito: EL ODIO Y LA CRITICA SON IMPUREZAS EMOTIVAS QUE PROVOCAN ESTADO DEPRESIVO Y RESTAN CAPACIDAD PARA PENSAR Y VIVIR EN ARMONIA, fin de la cita. “Vete de delante del hombre necio, porque en él no hallarás labios de ciencia”. Proverbio 14:7
