NEW YORK.- El presidente de la Asociación de Bodegueros en Estados Unidos (ASOBEU) y otros directivos de la entidad amenazaron con un boicot contra el envío de remesas y la compra de productos criollos en sus negocios, de mantenerse el cierre de las oficinas de la Junta Central Electoral (JCE) en el exterior y específicamente en el Noreste de Estados Unidos.
El presidente de ASOBEU junto a Manny Lora, secretario general, Radhamés Rodríguez, director financiero y Zulay Mateo, asistenta del director ejecutivo, dijo que la medida perjudica grandemente a los miembros de ese sector, debido a que sus empleados se verán imposibilitados de obtener los importantes documentos que se emitían en las oficinas de la junta.
Recordó que ASOBEU, tiene una matrícula de más de 10.000 miembros que si asumen una medida radical, harían un gran hueco a la economía de la República Dominicana.
Murphy, explicó que la dirección de la organización se mantiene en consulta para determinar la posición que adoptará después de haberse hecho oficial ayer martes la clausura de las oficinas de la JCE, la suspensión de los servicios y la cancelación de sus empleados.
«No es posible que nosotros como uno de los principales soportes de la economía del país, seamos sacrificados de esta manera por el presidente Danilo Medina y las autoridades de la JCE a quienes pedimos llegar a un acuerdo con el que se logre la reapertura de las oficinas de la junta en ultramar», sostuvo el dirigente bodeguero.
Dijo que los cubículos del tribunal electoral, abiertos hace más de diez años en el exterior, tienen que seguir operando, porque se debe tomar en cuenta el enorme dalo que esa decisión acarrea el sector productivo.
Llamó al presidente Medina a no abandonar a su suerte a los dominicanos y dominicanas de la diáspora y le recordó al mandatario que en su última visita como candidato a Nueva York, la semana santa del 2012, prometió «villas y castillos», pero que a la hora de perfilar el presupuesto, los criollos en ultramar han sido nuevamente víctimas de una estafa de otro político dominicano que vino a engañarlos para conseguir el voto.
En Nueva York, la candidatura de Medina y el PLD fueron derrotadas con un porcentaje significativo de votos en favor del opositor PRD, por lo que muchos creen que la decisión de cerrar las oficinas de la JCE, es parte de una «venganza política» en la que ahora pagan justos por pecadores.
Murphy concluyó diciendo que el gobierno debe restaurar los recursos que tenía la JCE en sus presupuestos anteriores y que durante una década, no afectaron sus operaciones en el exterior.