NUEVA YORK.- Durante un homenaje que le hizo el Comité del Dominicano en el Exterior (CODEX) al dedicarle la celebración de su trigésimo primer aniversario, el cónsul general de la República Dominicana en esta ciudad, Carlos Castillo, destacó el esfuerzo de sus connacionales inmigrantes por superarse académicamente, y sus aportes del13% al Producto Interno Bruto (PIB) del estado de Nueva York.
Asimismo, Castillo dijo que ha venido dándole cumplimiento a las instrucciones precisas que recibió del presidente Danilo Medina “para que acerque el Consulado a la comunidad y modernizarlo para hacer más eficientes los servicios que se ofrecen a nuestros contribuyentes y constituyentes”.
Precisó que “como servidores públicos nos debemos a nuestros connacionales y debemos estar directamente vinculados a la comunidad”.
Otro de los ejes fundamentales que ha venido cumpliendo Castillo durante su gestión, consiste en la promoción de la inversión extranjera en la República Dominicana, citando como ejemplo la compra del proyecto turístico Playa Grande, en Cabrera, por un monto de US$150 millones por el grupo de inversionistas Discovery Corporation, el cual ha invertido unos mil 200 millones de dólares. Se trata del proyecto turístico más grande en El Caribe y Centroamérica.
Indicó que el turismo del mercado norteamericano se ha incrementado en la nación dominicana, siendo la empresa Apple Lisure Group la que lleva más turistas del mercado estadounidense anualmente, pues compró y administra 16 hoteles, creando 7 mil empleos.
La diáspora estimada en unos dos millones 114 mil dominicanos que viven en los Estados Unidos de Norteamérica y contribuyen no sólo con la economía del estado de Nueva York, sino también con la de su propio país de origen, ya que cada año envían en remesas unos 6 mil millones de dólares, según dijo el cónsul general Carlos Castillo al evaluar como positivo el trabajo de sus connacionales en el extranjero.
Subrayó que de la agenda comunitaria de trabajo en la que se desarrollaron diversos temas sobre los problemas que en materia de salud, vivienda, educación, seguridad y asuntos migratorios afectan a la comunidad dominicana en los estados bajo su jurisdicción -Nueva York, Nueva Jersey, Pensilvania y Connecticut- se tuvo como conclusión la carencia de información, por lo que el Consulado ha tomado las medidas correspondientes para superar esa situación.
“Nuestra comunidad necesita que todos los sectores organizados, los sectores público y privado de la comunidad nos agarremos de las manos para trabajar arduamente en beneficio de todos los hombres y mujeres que representamos la dominicanidad en los Estados Unidos de Norteamérica”, manifestó.
Dijo que debido a la incidencia positiva de los dominicanos a la economía del estado de Nueva York, a través de pequeñas y medianas empresas, le ha cambiado el nombre de la primera minoría por el de “segunda mayoría en la ciudad de Nueva York”, lo que tiene mucha base y fundamento.
Castillo recibió una hermosa placa que le entregó Máximo Padilla, presidente del Comité del Dominicano en el Exterior, en reconocimiento a sus trabajos al frente de la administración consular en beneficio de la comunidad dominicana y resaltó sus cualidades como ser humano definiéndolo como una persona trabajadora, humilde y que ha modernizado el Consulado General de la República Dominicana llevándolo al centro de su comunidad.
En la mesa principal estuvieron ocupando asientos, además del cónsul Castillo y Padilla, entre otros, Reinaldo Paulino, el doctor Rafael Lantigua, quien recibió una medalla de reconocimiento del Codex y había recibido recientemente en Santo Domingo el Premio Internacional al Emigrante Dominicano Oscar de la Renta; Fernando (Nando) Jiménez y William Jiménez.
A propósito de ello, el cónsul Castillo sugirió que todos los dominicanos que reciban dicha premiación sean declarados embajadores advitan, ya que “el diseñador de modas Oscar de la Renta fue embajador de embajadores y todos los dominicanos residentes en el exterior llevan su patria en su mente y en su corazón representando la dominicanidad”.