SANTO DOMINGO DE GUZMAN,RD.- En 1844 en el país no había condiciones para que Juan Pablo Duarte asumiera la presidencia de la República, como se la ofrecieron.
El historiador José Chez Checo consideró que, a pesar del liderazgo del patricio, la influencia de los sectores conservadores que encarnaban Pedro Santana y Buenaventura Báez era tan fuerte que si Duarte hubiera aceptado la presidencia, como se la ofrecieron en tres ocasiones, lo hubieran tumbado en menos de siete meses.
Recordó que todas las estructuras de poder del país estaban en manos de los santanistas y los baecistas, al punto que Duarte, su familia y el ala liberal de los trinitarios fueron declarados traidores a la patria, fusilados algunos y expulsados del país los otros.
Graficó su consideración al recordar que Ulises Francisco Espaillat, a quien definió como el dominicano que más se parecía a Juan Pablo Duarte, fue derrocado por esas mismas fuerzas conservadoras a los siete meses de asumir el gobierno.
“Le pasó lo mismo que a Juan Bosch: a los siete meses lo derrocaron y lo mismo le hubiera pasado a Juan Pablo Duarte”, subrayó.
El historiador José Chez Checo dijo que desde 1844 a la fecha en el país ha habido un dominio preponderante de las fuerzas económicas conservadoras, las que se contraponen al pensamiento o ideología política del padre de la patria.
“Desde 1844 hasta hoy, en los 169 años de vida republicana, lo que ha habido es el predominio del pensamiento conservador en vez del pensamiento liberal”, puntualizó.
Al respecto, el historiador hizo un llamado a rescatar el pensamiento de Duarte y sus ideas liberales, pero observó que “esto debe hacerse despacio, porque nada se puede hacer así, de un momento a otro como se cree”.