SANTO DOMINGO, RD.- El abogado Namphi Rodríguez consideró que el país se encamina hacia “una dictadura blanda”, al intentar desconocer el derecho de elegir y ser elegido del expresidente Leonel Fernández, quien según dijo, puede postularse por cualquier organización política que desee llevarlo como su candidato presidencial.
El jurista se refirió al debate que ha generado la posibilidad o no que tiene el exmandatario, tras su salida del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), luego de perder las primarias ante Gonzalo Castillo.
“Los derechos políticos, en su doble dimensión de elegir y ser elegible, son un coto vedado, un terreno prohibido para limitaciones irrazonables del poder político de turno. De ahí, que Leonel Fernández está amparado en la Constitución para inscribir su candidatura presidencial por cualquier organización política”, dijo el jurista.
Afirmó que en caso de desconocerse ese derecho, el país se enrumba por el camino de una “dictadura blanda”, como, según afirmó, existe en Bolivia.
Rodríguez expuso que los derechos a elegir y ser elegible son “derechos superconstitucionales”, que “no admiten límites indebidos del legislador, como la interpretación prohibitiva y tendenciosa”, que, de acuerdo a su opinión, se le pretende dar al artículo 49.4 de la Ley 33-18, de Partidos Políticos.
Consideró que la democracia presupone la existencia de una “libertad objetiva” en la que los ciudadanos deben poder elegir entre propuestas, personas y programas electorales efectivamente diferentes entre sí, dentro de una gama de alternativas, lo suficientemente amplia como para permitirle a cada uno reconocerse en una orientación política.
Rodríguez habló del tema en Bogotá, Colombia, en el Segundo Congreso Internacional de Justicia Constitucional de la Asociación Mundial de Justicia Constitucional y la Asociación Colombiana de Derecho Procesal Constitucional.
Los artículos 49.4 y 134 de la ley electoral, señalan que un candidato no puede representar a otra organización, luego de haber perdido en un proceso electivo en su partido.
El 134 trata de evitar el transfuguismo en las organizaciones políticas.