Con la presencia del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, concluyó en el Palacio de Convenciones de La Habana el III Simposio Internacional La Revolución Cubana, génesis y desarrollo, que tuvo como colofón los debates sobre las figuras de Fidel Castro y Juan Bosch.
TOMADO DE GRANMA.CU
Con la presencia del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, concluyó en el Palacio de Convenciones de La Habana el III Simposio Internacional La Revolución Cubana, génesis y desarrollo, que tuvo como colofón los debates sobre las figuras de Fidel Castro y Juan Bosch.
La jornada de cierre, a la que asistió también Víctor Gaute López, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento Ideológico, contó con la presentación de ponencias dedicadas al pensamiento y la obra del Comandante en Jefe, destacándose la Concepción internacionalista de Fidel Castro, por el máster en Ciencias René González Barrios; Fidel y los Estados Unidos, del doctor Elier Ramírez Cañedo, y Fidel y la Justicia, impartida por la licenciada Katiuska Blanco Castiñeira.
Esta última describió emotivamente varios pasajes de la vida del líder histórico de la Revolución, desde sus comienzos como estudiante en el colegio de Belén, hasta convertirse en faro y guía de la nación cubana. «No existió causa justa que no lo tuviera entre los más vehementes defensores: el antirracismo, el adecentamiento de la vida universitaria y del país, la independencia de Puerto Rico, la solidaridad con el pueblo dominicano que sufría los desmanes de Trujillo…», señaló.
El doctor Eliades Acosta Matos se refirió a la figura del expresidente dominicano Juan Bosch y a sus contactos con Fidel y la Revolución Cubana, y recordó una frase célebre del fundador del Partido Revolucionario Dominicano, cuando, refiriéndose a Cuba, dijo: «Yo no voy a morir en la mentira. Me voy a acercar a la verdad».
La titular del Citma, Elba Rosa Pérez Montoya, expresó: «Debemos profundizar y divulgar el conocimiento de nuestra historia. Es una necesidad para las presentes y las futuras generaciones. No cesan los intentos de reescribirla, tergiversarla y engañar, utilizando medios y tecnologías modernas; de ahí la necesidad de cada uno de nosotros de multiplicarnos en la tarea de preservar y defender la memoria histórica».