NEW YORK, NY – El congresista Adriano Espaillat (NY-13)emitió la siguiente declaración a raíz del terremoto de magnitud 6.4 ocurrido esta mañana y el sismo que afectó a la isla a principios de esta semana.
“Han pasado 839 días desde que el huracán María tocó tierra en Puerto Rico. Hasta el día de hoy, la isla aún no se ha recuperado completamente del huracán históricamente devastador y la infraestructura local sigue siendo particularmente vulnerable a los desastres naturales. Esta verdad intolerable tiene graves consecuencias, algunas de las cuales han comenzado a manifestarse a raíz de varios sismos fatales que recientemente asolaron la isla y desplazaron a cientos de personas. Desafortunadamente, similar al huracán María, el grado de estos más recientes temblores -el más alto de los cuales alcanzó una magnitud de 6.4-, y el daño que causaron son históricos y requerirán una respuesta vigorosa», dijo el congresista Espaillat.
“Desde la devastadora temporada de huracanes de 2017, todos nos hemos dado cuenta de la incapacidad de la Administración Trump para ejecutar un programa satisfactorio de respuesta ante desastres en Puerto Rico. Durante meses -y en algunos casos años-, la ayuda se dejó sin distribuir, no se restableció la energía e infraestructura clave estuvo sin restauración y refuerzo. Las deficiencias de la Administración no sólo precipitaron la muerte de miles de ciudadanos estadounidenses en la isla, sino que también la dejaron en mal estado y sin su propia preparación para desastres.
“Los residentes de Puerto Rico son ciudadanos estadounidenses y la situación en la isla exige un liderazgo no partidista en Washington. Si bien no podemos controlar el momento o el impacto de un desastre natural, existen iniciativas preparatorias que nuestro gobierno puede y debe tomar para proteger a nuestros ciudadanos de su destrucción. Insto a la Casa Blanca y a mis colegas en el Congreso a equipar a Puerto Rico lo antes posible con los recursos necesarios para recuperarse completamente de esta reciente catástrofe y prepararse para futuros desastres naturales.
«Puerto Rico permanece en nuestras oraciones mientras buscamos soluciones duraderas que aborden este tema monumental».